La Unidad Militar de Emergencias (UME) ha despedido este domingo al cabo primero Alberto Guisado, fallecido en el incendio de Sierra de Gata (Cáceres), en un funeral marcado por el dolor y la emoción de su viuda y sus allegados.
El ministro de Defensa, Pedro Morenés, ha presido el acto castrense celebrado en la base de Torrejón de Ardoz (Madrid), sede de la UME, en el que ha impuesto a Guisado la Cruz del Mérito Militar con distintivo amarillo en reconocimiento a su labor.
Integrantes del I Batallón de Intervención de Emergencias, al que pertenecía Guisado desde marzo de 2007, han rendido honores al cadáver de su compañero pocas horas después de que buena parte de ellos participaran en las tareas de extinción del fuego en Sierra de Gata.
La viuda, arropada por familiares y amigos, no ha podido contener las lágrimas cuando el féretro ha hecho acto de aparición en el patio de la unidad a hombros de soldados de la UME bajo los acordes de «La muerte no es el final». Sobre la bandera que cubría el ataúd, Morenés ha impuesto a título póstumo la condecoración al cabo fallecido.
A continuación, el jefe de la UME, teniente general José Emilio Roldán, ha entregado a la viuda la medalla, la bandera plegada y la boina amarilla de su marido.
Al término de la ceremonia, que se ha prolongado durante media hora, Morenés se ha acercado a ella para transmitirle su pésame e intentar consolarla por el dolor de la pérdida de su esposo.
Al acto, han asistido el jefe del Estado Mayor del Ejército (Jemad), almirante Fernando García Sánchez; los mandos de los tres Ejércitos; la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, y el portavoz de Defensa del PSOE, Diego López Garrido.
Entre las autoridades extremeñas, han estado presentes el consejero de Administración Pública de la Junta, Pedro Tomás Nevado Batalla, y el alcalde de Gata, Miguel García Cayetano, en representación de los municipios afectados por el incendio.
El cortejo fúnebre con los restos mortales llegó a primera hora de la tarde de este domingo al cuartel general de la UME, donde se instaló la capilla ardiente.
El féretro fue trasladado desde Cáceres una vez que se le practicó la autopsia al cadáver para conocer las causas exactas del fallecimiento.
Guisado, de 35 años y con dos hijos, murió este sábado, al caer el camión autobomba en el que iba por un desnivel de 300 metros, en un paraje abrupto conocido como Cruz de Piedra.
Primer efectivo fallecido en una intervención de emergencia
Guisado es el primer miembro de la UME que fallece en el transcurso de una intervención de emergencia desde que este cuerpo se creó en octubre de 2005 para colaborar en catástrofes de diversa naturaleza en todo el territorio nacional.
Hasta ahora, solo un integrante de la unidad había muerto en acto de servicio, hecho que ocurrió en marzo del pasado año cuando hacía prácticas de buceo en el pantano de Entrepeñas (Guadalajara).
En el accidente que le costó la vida a Guisado, resultaron heridos otros tres miembros de la UME que iban en el mismo vehículo, quienes evolucionan favorablemente de las heridas sufridas.
El más grave, que permanece ingresado en el Hospital Infanta Cristina de Badajoz, fue intervenido quirúrgicamente en las piernas, está estabilizado y su pronóstico es reservado, según fuentes de la UME.
Los otros dos heridos continúan en el Hospital de Coria, donde se prevé que estén ingresados al menos hasta mañana.
Estrella Digital/Agencias