Esperando la nada. Así se ha quedado la oposición y así se verá este miércoles en la Asamblea madrileña durante el debate de estado de la región cuando le pidan cuentas a la presidenta Esperanza Aguirre.
Una hora y media de discurso y pocas soluciones. La presidenta ha alargado con moralidad la falta de iniciativas para general empleo, las más esperadas. Lejos de aportar alguna, la Comunidad de Madrid lo que sí ofertará este próximo curso es 26.000 plazas a los desempleados para estudiar alemán, inglés y chino y favorecer su inserción al mercado laboral. Parece que la presidenta ya da por perdido que sea en Madrid donde se genere empleo y pone una rampa de despegue a la salida del país. No ha habido noticias resonantes, ni conejos de la chistera. Nada ha sorprendido. Su tendencia a estrujar a los sindicatos se ha vuelto a ver en quitarles las aportaciones que reciben para dársela a los desempleados.
Y tras estas dos medidas, una petición al estado, una larga lista de medallas que ponerse y lecciones de moralidad. La presidenta, al más puro estilo María Dolores Cospedal, también empieza por meterle mano a los diputados autonómicos. Nada de ‘sueldo cero’ como en el caso manchego, Madrid quiere la mitad de los diputados. Y en una llamada a Rajoy sin mencionar su nombre, exige que se revise el sistema de Estado de Autonomías para poder suprimir estructuras superfluas y el número de políticos. “Es deber moral la reducción de los aparatos públicos”, ha dicho la presidenta de Madrid y ha reprochado la falta de la misma al partido socialista por gastar “a manos llenas el dinero de sus hijos, su ciudad y su contribuyente”. Sin embargo, ni una mención de moralidad sobre su medida de no atender a los inmigrantes sin tarjeta sanitaria.
La demagogia también ha sido una de las palabras más sonadas en su discurso de apertura: “Si queremos mantener lo esencial hay que renunciar a lo que no lo es y no cabe demagogia”. Era la forma de Aguirre de defender sus recortes en Sanidad, Educación y a los funcionarios, pero sin mencionar recortes en Sanidad, Educación y funcionarios. Lo que quería se sobrentendía, callar a la oposición. Pero el acto de demagogia en ese discurso vino por ella misma. Aventuró a decir que tras nueve años en el poder sabía lo que querían los ciudadanos de los políticos: “Que les digamos la verdad y que nos apretemos el cinturón con la misma fuerza que ellos”.
Pero los ciudadanos aún esperan la verdad de muchas cosas del Gobierno de Aguirre. La verdad de Eurovegas. La verdad de cuánto dinero público se va a desviar, la verdad sobre la ubicación, la verdad sobre cuántos puestos va a generar o la verdad sobre si es real que se va a cambiar la ley del tabaco como ella afirma o no, como asegura el Gobierno central. La presidenta da su compromiso a decir la verdad, pero parece que la verdad es que la presidenta sólo habla cuando le interesa. Los medios han estado todo el invierno tras la información de este complejo del juego e información han recibido poca. “Puedo entender que haya ciudadanos a los que no les guste un proyecto de ocio y servicio, pero dejarlo pasar es una frivolidad”.
Habrá que esperar a este miércoles para ver qué entiende la oposición por frivolidad. Tras el recorte de la Comunidad de 300 millones de euros en los Presupuestos de 2013, Aguirre anuncia sus logros en educación. “Todos los nuevos colegios de la CAM serán bilingües” o “los centros tendrán autonomía para adoptar la jornada intensiva”.
El Gobierno de la región hará una modificación legal para que los Ayuntamientos puedan designar libremente a los Jefes de Policía de los municipios, y hacer una nueva ley de acogimiento que facilite la adopción.
Una mención a la empresa ‘Canal de Isabel II Gestión’, “cuando las condiciones de los mercados sean adecuadas, abrirá su participación al sector privado”. Vuelta la mula trigo. Ya lo ha conseguido con Telemadrid, este martes lo ha anunciado: “El Gobierno respaldará el proceso de privatización del ente público”, pero hacerlo con el agua no es un juego.
Y entre tanta mención a pequeñas cuestiones, ninguna a un plan de empleo y una clara sobre el déficit: “Hacienda nos ha devuelto menos”. Madrid tiene que cumplir su objetivo y recortará 2.000 millones de euros más en los de 2013.
Eva Díaz