El Rey Don Juan Carlos ha animado este lunes a las empresas brasileñas a invertir en España y ha ofrecido a la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, el apoyo de las compañías españolas «punteras a nivel mundial» para los «grandes acontecimientos» que organiza su país para 2014, con el Mundial de Fútbol, y en 2016, con los Juegos Olímpicos, a los que se ha referido como «grandes desafíos» a los que ha vaticinado un «gran éxito». Durante el almuerzo oficial que ha ofrecido en honor de la presidenta brasileña, y en presencia de un centenar de invitados, el Monarca ha lanzado este mensaje a las empresas brasileñas, a las que además ha asegurado que podrán encontrar en España «una de las economías más abiertas del mundo, legislación favorable, modernas infraestructuras y gran afinidad cultural», además de una «excelente plataforma» para su entrada «en los mercados de Europa, Mediterráneo, Oriente Medio y Africa».
Por su parte, la presidenta Rousseff ha destacado que España es ya el segundo inversor en Brasil y las empresas españolas ya tienen un destacado «peso económico y comercial» en el país, pero ha asegurado que todavía queda «mucho espacio por explorar». «El futuro presenta muchas oportunidades, ofrecidas por nuestro programa de aceleración del crecimiento», ha asegurado.
Brasil, «aliado» de España para el crecimiento
Además, ha aprovechado para, recordando la «experiencia latinoamericana» de la última década, recomendar la persistencia en el «camino del crecimiento, con protección de la renta y el empleo», porque son «elementos indispensables para el éxito» de cualquier política.
El Rey lamenta además que la «profunda y prolongada crisis económica» global está «afectando gravemente a España y al conjunto de Europa»
Dicho esto, ha garantizado que Europa y España pueden contar «en todas las instancias multilaterales» con Brasil como «un aliado dispuesto a participar en un pacto a favor del crecimiento, la recuperación de la demanda global y el empleo».
Durante su discurso, el Rey también se ha referido a las relaciones en materia de política migratoria y ha destacado la «mejora producida en lo referente a la entrada de ciudadanos brasileños que visitan España», que en el pasado provocó disputas diplomáticas entre ambos países.
Don Juan Carlos ha resaltado la «buena colaboración entre las autoridades competentes» de Brasil y España «dentro del fructífero diálogo bilateral en materia migratoria» y ha aprovechado además para hacer una propuesta de continuar avanzando en esta materia.
En concreto, ha hablado de la «posibilidad de estudiar y poner en práctica procedimientos que faciliten la estancia temporal en Brasil de profesionales españoles altamente cualificados, con el fin de contribuir a cubrir las necesidades que demanda el mercado de trabajo brasileño».
Amplio campo de colaboración en investigación e innovación
Además, el Rey ha mencionado el «gran esfuerzo» que está haciendo España para reforzar las relaciones culturales y ha destacado que es una cuestión de «gran interés» la potenciación del conocimiento de la lengua española por los ciudadanos brasileños. Asimismo, ha defendido que Brasil y España tienen «un amplio campo de colaboración en el ámbito de la investigación, el desarrollo y la innovación».
El Rey ha lamentado además que la «profunda y prolongada crisis económica» global está «afectando gravemente a España y al conjunto de Europa», con una «repercusión muy grande en materia de empleo, lo que nos ha llevado a tasas de paro muy elevadas».
Por ello, ha asegurado que España está haciendo «un gran esfuerzo para recuperar cuanto antes la senda de crecimiento», lo que pasa en parte por «una mayor internacionalización de nuestras empresas».
Además, el Monarca, que ha hablado en portugués al inicio de su discurso, ha coincidido con la presidenta brasileña en la defensa de la «herencia histórica común» que comparten ambos países, apoyada en «valores fundamentales que se traducen en el Estado de derecho, el sistema democrático de Gobierno, el respeto y la defensa de los Derechos Humanos y las libertades fundamentales y el progreso económico y social».
El Rey asegura que España está haciendo «un gran esfuerzo para recuperar cuanto antes la senda de crecimiento»
Apoyado en dos muletas
En espera de ser operado de la cadera izquierda, tal y como anunció durante la pasada Cumbre Iberoamericana, el Rey continúa sirviéndose del apoyo de dos muletas para caminar. Con ellas se ha dirigido a la sala donde ha recibido a la presidenta brasileña, aunque después ha salido con una sola, después de hacerse una primera foto con la presidenta brasileña y los ministros de Asuntos Exteriores español, José Manuel García-Margallo, y brasileño, Antonio Patriota.
Después, ha comenzado el saludo a una treintena del centenar de invitados al almuerzo en el Palacio Real, para el que nuevamente el Rey ha contado con la ayuda de una muleta, que ha dejado en solo una durante el besamanos, en el que también han participado la Reina y los Príncipes de Asturias, Don Felipe y Doña Letizia.
Al almuerzo oficial asisten entre otras autoridades la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, los presidentes del Congreso, Jesús Posada, y el Senado, Pío García Escudero, los ministros de Fomento, Ana Pastor, Industria, José Manuel Soria, y Educación, José Ignacio Wert, y la alcaldesa de Madrid, Ana Botella. También hay una nutrida representación del mundo empresarial, integrada, entre otros, por los empresarios que acompañaron al Rey en su reciente viaje a Brasil.
En el almuerzo, los invitados degustarán un menú compuesto por huevos escalfados con pasta, lomos de lubina al vapor con salsa de orégano y soufflé frío de mandarina con caramelo, según han informado fuentes de Casa Real.
Estrella Digital/EP