La Agencia Tributaria de Cataluña acusa al Duque de Palma, Iñaki Urdangarin, de haber «interpuesto» a la sociedad Aizoon, cuya propiedad comparte a partes iguales con la Infanta Cristina, para facturar «ciertos servicios de carácter personalísimo», como el servicio doméstico, que nada tenían que ver con la actividad de la inmobiliaria, todo ello con el objetivo de reducir su propia tributación en la declaración del IRPF. En un extenso informe al que ha tenido acceso Europa Press, la Agencia Tributaria señala cómo durante 2007 y 2008, ejercicios en los que Urdangarin habría defraudado a Hacienda al menos 240.000 euros, utilizó Aizoon como «pantalla» para tributar gastos como los de su propio servicio doméstico o los de su asistenta personal, con el objetivo de beneficiarse de un tipo impositivo inferior (el aplicado a las sociedades).
Tributar menos
Asimismo, de la inspección realizada resulta, según el informe, que durante esos años el yerno del Rey Don Juan Carlos percibió retribuciones procedentes de entidades privadas por su condición de consejero asesor que, sin embargo, eran facturadas a través de Aizoon con el mismo fin de tributar menos en su declaración de la renta.
Se trata de unos ingresos que percibió de mercantiles como Motorpress Ibérica, Aceros Bergara, Mixta África, Pernod Ricard (Francia), Havas Sports France y Seeliger y Conde que quería «ocultar» a la hora de pagar el IRPF y que, de acuerdo con los datos obtenidos por Hacienda, «resulta claro» que «deben imputarse a la persona física [en relación al Duque de Palma] y no a la persona jurídica [Aizoon]».
En este sentido, el informe cuantifica en un total de 569.720 euros los ingresos netos obtenidos por la prestación de servicios en 2007 y en 444.147 euros en 2008, cantidades que «deben ser consideradas rentas del señor Urdangarin e integrarse en su IRPF».
La Agencia Tributaria indica asimismo que a estas retribuciones se suman los 130.000 euros que el encausado percibió en julio de 2007 de esta sociedad alegando el Duque que se trataba de un préstamo del que, sin embargo, «no existe contrato ni constancia alguna de su devolución». A ello cabría añadir otros 147.800 euros que habría cobrado en 2008 mediante cheques librados contra una cuenta del Institito Nóos de Investigación Aplicada.
En la plantilla habçia «una haciendo corta y pega de internet»
Uno de los motivos que lleva a esta conclusión radica, según los inspectores, en que la plantilla de Aizoon no era «idónea» para los servicios que supuestamente prestaba. Así, la «teórica» plantilla de la sociedad estaba integrada, entre otros, «por cuatro empleados del hogar, una estudiante, una encuestadora que dice trabajar para otra persona, dos personas que nunca nadie ha visto trabajar para la sociedad, un chico de los recados y una con primero de estudios de Enfermería haciendo ‘corta y pega’ de Internet».
«De acuerdo con esa composición, esa plantilla difícilmente podía prestar los servicios de asesoría a las entidades a las que facturaba y de las que el señor Urdangarin era consejero/asesor», asevera la Agencia Tributaria.
Es más, prosigue el informe, la única actividad que realizaba la sociedad era la del alquiler de inmuebles, por un importe anual (30.576 euros en 2007 y 27.329 en 2008) «muy inferior» a los importes facturados por la supuesta actividad de asesoría (645.453 euros en 2007 y 494.156 un año después).
Hacienda señala así que la existencia de Aizoon sólo se justifica como «pantalla» de la cual se servía Urdangarin para ocultar las retribuciones personales que percibía a raíz «de su propia actividad personal», deducirse gastos no relacionados con esta sociedad y sujetarlas a una tributación inferior.