El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, no emprenderá acciones judiciales individuales contra su extesorero Luis Bárcenas. Este lunes ya lo medio insinuó la secretaria general del Partido Popular, María Dolores de Cospedal, en la rueda de prensa ofrecida desde Génova, y a estas horas ya es la versión generalizada que se maneja en el Palacio de la Moncloa. Según han informado fuentes gubernamentales, Rajoy irá en la acción judicial conjunta que el Partido Popular está preparando contra el exsenador y todos aquellos que «hayan manchado su honor» en el caso de las informaciones que apuntaban a una posible contabilidad oculta de la formación. No obstante, el nombre del presidente es posible que no aparezca. Sin tener mucha información aún al respeto, pero tal y como se están formulando dichas acciones desde Génova, es probable que el partido emprenda acciones judiciales como persona jurídica propia, de tal manera que no haya ningún nombre concreto, sino la formación en su conjunto. La dirección del PP, además, también da la opción a sus miembros de que aquellos que lo deseen y a título personal emprendan las acciones jurídicas que estimen oportuno. Sin embargo, hasta la fecha, Cospedal es la única que lo ha hecho.
Hace un mes, en el Comité Ejecutivo extraordinario del PP que convocó Rajoy para tratar este caso, y en el que tildó de «falsedades» todas las informaciones publicadas hasta el momento por los diarios El País y El Mundo, ya anunció que el PP reaccionaría judicialmente contra todas ellas. Dos días después, el vicesecretario general, Carlos Floriano, lo confirmó en una rueda de prensa: «Actuaremos contra todos los que han atribuido al PP o a su dirección conductas ilegales o irregulares, y cuando digo todos, es a todos, como partido, a los que lo hayan podido filtrar y a los que lo hayan publicado». En aquel momento no se precisó ni contra quiénes se dirigiría, ni cuándo, ni quiénes serían los que de manera individual emprenderían acciones jurídicas. Hoy ya sabemos que Bárcenas es uno de los señalados, pero seguimos sin saber quiénes son los dirigentes ‘populares’ que a título personal actuarán.
Por el momento, el presidente de Honor, José María Aznar, y la secretaria general son los únicos que han movido ficha. El primero contra El País, por haberle situado como el artífice de la práctica ilegal de repartir sobres en B a dirigentes del partido, y la segunda, además de contra este periódico, presentó una demanda civil contra Luis Bárcenas. Sin embargo, sobre la actuación jurídica del presidente del Gobierno aún no se había detallado nada. En un principio se dio a enter que Mariano Rajoy no sólo iría en la estrategia conjunta, sino que también emprendería acciones jurídicas individuales, igual que el resto de compañeros. Pero nunca acabó de ser confirmado públicamente. Durante varias semanas ésta ha sido la pregunta más coreada por los periodistas. No obstante, todo han sido despejes sobre esta cuestión. En Génova remitían a Moncloa, y en Moncloa remitían a Génova. El caso es que nadie confirmaba nada.
El pasado lunes, por fin se comenzó a arrojar un poco más de luz sobre este asunto. Después de preguntar a Sáenz de Santamaría por esta cuestión y que ella se negara a contestar, a Cospedal no le quedó más remedió que dar algún tipo de explicación. No fue clara en su respuesta, pero más o menos dio a entender que Rajoy iría en la acción conjunta del partido, pero que el partido estaba estudiando evitar que fuera individualmente por ser el presidente del Gobierno. «Es el presidente del Gobierno, no sólo del PP y por ello estamos analizando con mayor detenimiento si debe o no llevar a cabo esa actuación judicial», dijo la secretaria general, tras matizar que el deseo del presidente era «ir con todos sus compañeros».
Con estas declaraciones, Cospedal ya dejó bastante claro que lo más probable era que Rajoy no demandara individualmente a Bárcenas, y este viernes ya ha sido confirmado por fuentes de Moncloa. Una decisión que se toma en un momento especialmente delicado, en el que cada vez es más evidente el chantaje del extesorero a la formación. En Génova y en Moncloa siguen negando dicho chantaje, pero la decisión de Bárcenas de denunciar al partido, primero «por despido improcedente», y después por haber entrado en su despacho sin su consentimiento, tal y como publica La Gaceta, deja en evidencia todas las declaraciones públicas que durante semanas llevan haciéndose a este respecto.
Ahora bien, la actitud generalizada sigue siendo la de no nombrar a Bárcenas en comparecencias públicas, como si eso fuera a borrar lo que hasta la fecha se ha conocido. Este viernes, Sáenz de Santamaría ha vuelto a dar muestra de ello. Después de cuatro preguntas relacionadas con este tema, la vicepresidenta ha insistido en que la mesa del Gobierno no es el sitio adecuado para hablar de cuestiones que conciernen a un partido político. No obstante, la presión interna dentro del partido y del propio Ejectivo crece por segundos, y sus protagonistas siguen en silencio. La muestra más evidente de ello es que el PP aún no ha concretado cuándo presentará las acciones judiciales que lleva anunciando desde hace más de un mes.