El Príncipe ha afirmado en la tarde de este domingo tras ver a su padre que el Rey está «despierto» y «satisfecho» de haberse operado, pues la estenosis de canal y la hernia discal que venía arrastrando desde hace tiempo le generaba pesados «dolores».
En declaraciones a los medios de comunicación al abandonar la clínica, ha contado que ha podido intercambiar unas palabras con su padre durante unos instantes solo para que éste supiera que su familia estaba allí.
El Heredero de la Corona ha reconocido que el Rey afrontará a partir de ahora una etapa de «trabajo duro» para recuperarse.
Ha calificado de «magnífico» el equipo realizado por el neurocirujano Manuel de la Torre y su equipo y ha señalado que el monarca estaba «a gusto», dentro de lo bien que se puede uno encontrar tras una operación como a la que se ha sometido hoy el jefe del Estado.
Don Felipe no ha podido avanzar cuánto tiempo permanecerá ingresado su padre.
El Príncipe ha abandonado la clínica junto a su mujer, Doña Letizia, en un Audi negro propiedad del Estado que conducía él mismo.
Ataviados con ropa de sport, los Príncipes se han parado a saludar y a estrechar las manos de los curiosos que se agolpaban a la entrada de la clínica y que les han recibido con aplausos.