El Partido Popular puede estar tranquilo. Éste es el mensaje final que fuentes próximas a Álvaro Lapuerta confirman a Estrella Digital. El malestar del PP en estas últimas 24 horas venía precedido por convocar a Lapuerta a la Junta Directiva del PP, estando imputado.
Fuentes próximas a Álvaro Lapuerta recuerdan que ya en el último Congreso de Sevilla el propio Lapuerta solicitó al presidente ser miembro del Consejo Ejecutivo ‘popular’, petición que le fue denegada pero que a cambio se le ofreció ser miembro de la Junta directiva. Cargo, que el propio Álvaro Lapuerta declinó y así se lo hizo saber al mismo Miguel Arias Cañete. Por lo que los ‘populares’ pueden pacer en paz, puesto que el extesorero del PP no tiene ninguna intención de asistir a la ya polémica junta directiva.
Propios allegados a Álvaro Lapuerta recuerdan a los que parecen olvidarlo, obviarlo o dudarlo la honradez y honorabilidad de Álvaro Lapuerta, que, aun teniendo el cargo que ostentaba como tesorero del partido de Génova, no quiso gozar de dietas, ni se le pagaban comidas, también rechazó el coche y chófer del partido (utilizando diariamente su propio automóvil) e incluso se pagaba él mismo la factura de móvil. La integridad, honorabilidad y decencia en la persona de Lapuerta también se traduce en unas cuentas correctas e impecables durante su época como tesorero del PP. Tal era su austeridad, que cabe recordar al mismo Rajoy que tras su 15 años de lealtad al PP y a su cargo al frente de la Tesorería ‘popular’, su partido le agradeció sus servicios prestados con un mero bolígrafo Montblanc. Y no, como diría la secretaria general del PP María Dolores de Cospedal, con cuantiosas indemnizaciones en diferido de 200.000 euros como al imputado Luis Bárcenas, que fue capaz, presuntamente, de robar a su propio partido y es éste el que encima le otorga una compensación económica (aunque sea en diferido).
Por ello, el testimonio y actidud de Álvaro Lapuerta debe primar por encima de la de otros personajes. Su conducta, disposición y talante de los que ha dado ejemplo en todos estos años no debe sembrar la polémica y menos aún la duda.