El vicesecretario de Política Autonomía y Local del PP, Javier Arenas, ha manifestado este domingo que los que protagonizan ‘escraches’ son «acosadores» y ha censurado que el PSOE con sus «gestos y opiniones» los proteja.
Durante su intervención ante la Junta Directiva del PP de Sevilla, Arenas ha señalado que los socialistas, muchos días, lanzan gestos y opiniones que protegen «a los acosadores» y ha indicado que los desahucios son «herencia» del anterior Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
Según el dirigente popular, cuando gobernaban los socialistas, se producían 80.000 desahucios al año y todos los que se producen ahora, se iniciaron con el Ejecutivo de Zapatero. Se ha preguntado dónde estaban en esa época los que ahora acosan.
«Los desahucios son parte de la herencia que hemos recibido del gobierno anterior», según Javier Arenas, para quien las políticas que conducen a la creación de empleo son las mejores contra los desahucios, porque suponen que las personas dispongan de renta para pagar su hipoteca.
«¿Qué escrache ni escrache?, acosadores. Son acosadores», ha indicado Javier Arenas en referencia a las personas que protagonizan esos tipos de actos y ha apuntado que es «demencial» pretender defender unos derechos «pisoteando los derechos de los demás».
«El derecho a protestar está más que amparado, pero no consiste en absoluto en intimidar, insultar o en acosar a las familias», según ha señalado el vicesecretario del PP, quien ha apuntado que los derechos y libertades tienen unos límites clarísimos: «los derechos y libertades de los demás».
«Apagar los incendios recibidos»
Durante su intervención, Arenas ha indicado que el Partido Popular no ha podido aplicar aún su programa electoral porque se ha limitado a «apagar los incendios recibidos». Ha insistido en que el asunto de los desahucios y de las preferentes han sido herencia del Gobierno de Zapatero, que se dedicó a mirar hacia otro lado, mientras que el Ejecutivo de Mariano Rajoy ha «cogido el toro por los cuernos» y se está dedicando a afrontar esos problemas.
Ha indicado que lo que tiene que ocupar el 90 por ciento de tiempo es que España vuelva a ser una nación de empleo y de oportunidades para todos los españoles. Se trata de volver a repetir, según ha apuntado, lo que se hizo en la etapa del Gobierno de José María Aznar.
Según Arenas, las bases de la recuperación ya están puestas sobre la mesa y estamos encarrilados para resolver el problema del desempleo, de manera que 2013 va a ser el año puente entre la crisis y el crecimiento, porque ya se atisban posibilidades de recuperación.
A su juicio, son imprescindibles grandes acuerdos nacionales, pero no son posibles porque el PSOE dedica su tiempo a discusiones internas y «no sabe qué hacer con España y con la economía». Ha indicado que la última propuesta del secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, sobre la subida de los impuestos «suena», sin duda, a las propuestas y las recetas de Zapatero, las que llevaron a España a la crisis.
Para Arenas, tiene coherencia que Rubalcaba se refugie en las propuestas de Zapatero, que consistieron en subida de impuestos y en «despilfarro», hipotecando el futuro de los españoles. Ha indicado que el problema objetivo es que en España no hay un segundo partido con proyecto para el país.
Se ha mostrado convencido de que las reformas «imprescindibles», aunque «impopulares», que se han tenido que poner en marcha, acabarán siendo entendidas por los ciudadanos cuando comience la recuperación económica y la creación de empleo. Ese es también el camino, según ha dicho, para que se recupere la confianza en la política y las instituciones.