Twitter sigue revelándose como una red sumamente peligrosa en cuanto a la posible vulnerabilidad de los datos personales de las personas. El último caso que lo confirma es el de un joven de 20 años que ha sido detenido por la Guardia Civil en Guadalajara por almacenar información personal de más de 1.500 personas relacionadas con el mundo de la política, el deporte e incluso el periodismo.
Entre esos nombres de políticos figuraban los teléfonos y cuentas de correo electrónico de Rosa Díez y Toni Cantó, diputados de UPyD, que sí han autorizado a la autoridad a hacerlo público ya que ellos mismos habían sido quienes habían denunciado el hecho, comunicando injurias y amenazas tanto a través de «WhatsApp» como en sus correos electrónicos.
Otro de los personajes públicos que también han salido a la luz ha sido el periodista Pipi Estrada, cuyo teléfono ya había sido difundido en las redes sociales hace unos meses.
Al detenido, que se amparaba en frases como «63456XXXX de razones por las que Rosa Díez debe dimitir», con el número completo en el mensaje original, se le imputan delitos de descubrimiento y revelación de secretos, delitos por los que le podrían caer entre uno y tres años de cárcel.
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