En Valdemoro, la ciudad madrileña donde convergen los casos de espionaje que ha vivido la comunidad de Madrid, la vida política aún gira en torno a su exalcalde, exconsejero de Presidencia e Interior y ahora senador, Francisco Granados. Al margen de la alianza política con el actual alcalde, Granados cuenta con una guardia pretoriana en el Ayuntamiento, que ejemplifica su cuñado, concejal de Deportes, Germán Alarcón. El vértice de ese círculo de amistades es David Marjaliza, expintor, constructor y amigo de Granados desde los tiempos de militancia juvenil en Nuevas Generaciones. Marjaliza y su entorno, muy cercano al gobierno local, siguen haciendo jugosos negocios relacionados con adjudicaciones municipales. En un Ayuntamiento en el que trabajan varios allegados a este círculo de influencias.
La vida política de Valdemoro aún gira en torno a Francisco Granados
David Marjaliza sigue recibiendo adjudicaciones del consistorio de esta localidad madrileña pese a estar investigado en una pieza separada del 'caso Gürtel' que instruye el Juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz. Las últimas concesiones recibidas por Marjaliza, conocido entre sus allegados por el apodo de «Mortimer», han sido unas instalaciones deportivas y los garajes de la sede donde se instalarán próximamente los juzgados de primera Instancia e Instrucción de la zona.
Marjaliza, junto a Granados, formaba parte de una pandilla conocida en el pueblo como la de 'Los villanos'. Tiene además como encargada de sus finanzas y administradora de una gran parte de sus sociedades a Ana María Pilar Ramírez Fernández, cuñada del actual alcalde de Valdemoro, José Carlos Boza Lechuga. Ana María Ramírez está casada con un hermano del edil, José Manuel, que ejerce como cabo de la Guardia Civil en el servicio de seguridad del Colegio de Guardias Jóvenes. El matrimonio vive en un lujoso chalet situado en la calle de Portugal, 32, en Valdemoro, cerca de la mansión que se atribuye a Francisco Granados en la calle Chequia de la misma localidad. En este chalet Ana María tiene domiciliadas un total de doce de sociedades propiedad de Marjaliza, aunque en su momento fueron 33 las mercantiles resididas allí.
Ana María Ramírez, no sólo está presente en sociedades relacionadas con la construcción o la venta de pisos, sino que también es apoderada de la mercantil 'Centro Médico Valdemoro Plaza', ubicada en la Plaza de la Constitución de esta localidad madrileña, según la nota del Registro Mercantil en poder de este periódico.