La Mesa del Congreso ha ratificado su veto a las mociones que PSOE e Izquierda Plural presentaron hace dos semanas para rechazar lo que consideran «mentiras» del presidente Mariano Rajoy en relación con el ‘caso Bárcenas’, pero ha abierto un plazo de 48 horas para que estos dos grupos puedan presentar nuevos textos con el fin de que, si se consideran ajustados a Reglamento, puedan votarse en la sesión plenaria de la próxima semana.
Así lo ha confirmado el presidente del Congreso, Jesús Posada, que ya la pasada semana abrió la puerta a admitir nuevas mociones de PSOE e Izquierda Plural si su redacción se ajusta a las normas de la Cámara. Este martes, la Junta de Portavoces ha debatido los recursos que tanto PSOE como La Izquierda Plural presentaron contra sus mociones iniciales y que han cosechado el apoyo del resto de los grupos de la oposición.
En la reunión de la Junta, la portavoz del Grupo Socialista, Soraya Rodríguez, ha reiterado los argumentos incluidos en su recurso y ha insistido en que la Mesa del Congreso decidió conforme a «criterios políticos» y que el veto carece de todo «amparo legal y jurídico».
Por su parte, José Luis Centella, de Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), ha insistido en que su moción era congruente con la interpelación y de hecho ha recordado que tanto él como el ministro que le respondió, el titular de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, hablaron del ‘caso Bárcenas’ sin que fueran reprendidos desde la Presidencia. Sin embargo, el PP ha vuelto a defender su criterio de que el ‘caso Bárcenas’ no es un asunto del Gobierno, en todo caso del partido, y que para reprobar al presidente del Ejecutivo sólo existe un camino, que es la moción de censura.
PP: no es cuestión de vetos, sino de mayoría
Así lo ha señalado el secretario general del PP en el Congreso, José Antonio Bermúdez de Castro, quien ha vuelto a respaldar los vetos de la Mesa porque el espíritu de las mociones no era otro que pedir la reprobación o responsabilidades políticas al Gobierno a través de una moción ordinaria. Además, ha insistido en que ésta no es una cuestión «ni de votos ni de vetos», sino de mayorías y de normas, y ha criticado la «artificialidad» demostrada por «algunos grupos» en sus argumentos.
A renglón seguido, la Mesa del Congreso se ha vuelto a reunir para rechazar sendos recursos, quedando anuladas las mociones originales. Ahora bien, el presidente de la Cámara, Jesús Posada, ha informado a su salida de que los grupos del PSOE e Izquierda Plural tendrán de plazo hasta el próximo jueves a las ocho de la tarde para que presenten una nueva redacción de su moción que «cumpla con el Reglamento» con el fin de que pueda ser debatida en el próximo Pleno, puesto que, según ha recalcado, tendría preferencia sobre el resto de mociones.
A esta decisión también se ha referido la secretaria tercera de la Mesa, la socialista Teresa Cunillera, pero en su caso para cuestionar que la mayoría del PP en ese órgano no hubiera adoptado esta posición la semana pasada y para reiterar que la congruencia del contenido de las mociones con el debate de las interpelaciones.
«Si se hubiera pensado esto la semana anterior, nos habríamos ahorrado todo el devenir de esta semana», ha dicho la socialista catalana, quien se ha mostrado seguro de que tanto el PSOE como Izquierda Plural serán capaces de reformular sus mociones «manteniendo el espíritu» de los textos iniciales.
En declaraciones a los periodistas, la portavoz del Grupo Socialista se ha mostrado a abierta a presentar una nueva redacción, pero ha dejado claro que esa moción será «congruente» con el contenido de la interpelación y, que ha remarcado, «versaba sobre la demostración de que el presidente del gobierno mintió y faltó a la verdad en sede parlamentaria».
SI QUIEREN, BUSCAMOS SINÓNIMOS
También Centella se ha mostrado dispuesto a «buscar sinónimos» y presentar una nueva redacción pero ha avisado de que considera irrenunciable que se incluya una crítica a Rajoy por su relación con Luis Bárcenas porque no se puede permitir que el presidente no pueda ser objeto de una crítica puntual: «Parece que al presidente no se le puede hacer ninguna crítica porque hacerlo ya se interpreta como una moción de censura», se queja.
En todo caso, el ‘número dos’ de IU se declara abierto a un buscar un punto de encuentro y está convencido de que «antes o después» se votará en el Congreso un juicio sobre la actuación del presidente del Gobierno en relación con el ‘caso Bárcenas’.
Por su parte, el ‘número dos’ de los ‘populares’ en el Congreso, José Antonio Bermúdez de Castro, ha advertido de que si los grupos interpelantes modifican la redacción de su moción, el PP no pondrá inconvenientes a las nuevas iniciativas siempre que se ajusten al Reglamento de la Cámara.