El ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, ha advertido, en el debate sobre el proyecto de Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) en el Pleno del Congreso, de que la repetición de curso de las etapas de Primaria y la ESO supone un coste de 24.000 millones de euros. Durante la defensa del proyecto normativo, Wert ha asegurado que, para «acabar con el abandono y el fracaso escolar», la norma propone itinerarios «flexibles y reversibles» para aquellos alumnos que «se salen de la autopista» y ha advertido de que la repetición en España es una «lacra», que genera un uso «muy ineficiente» de los recursos.
En este sentido, ha indicado que cada repetidor entre Primaria y ESO, haciendo media entre las dos etapas, incrementa el coste del sistema en una media próxima a los 7.000 euros.
Sobre de las lenguas cooficiales en la LOMCE, el ministro ha defendido que se trata de la primera norma educativa que otorga a estas lenguas el «mismo tratamiento que el castellano», contestando así al diputado de CiU Martí Barberá o al de ERC Joan Tardà que han acusado al Gobierno de discriminar, relegar y expulsar al catalán del sistema educativo y de querer acabar con la inmersión lingüística de Cataluña.
«No es justo ni se ajusta a la verdad que haya una minusvaloración de las lenguas oficiales propias de las comunidades autónomas. Es la primera ley que otorga en horas, evaluación y efectos de utilización a estas lenguas el mismo tratamiento que el castellano y respeta el sistema de inmersión lingüística», ha aseverado.
El último informe de la OCDE, el PIACC, que analiza las competencias en lectura y matemáticas de los adultos españoles, le ha servido al titular de Educación para defender su reforma. A su juicio, el trabajo proporciona una radiografía «muy precisa» de los problemas educativos.
En este sentido, ha indicado que tras haberse conseguido unas «sustancial mejora», durante la Transición española, «no se han hecho esfuerzos comparables, ni en resultados ni en términos de la extensión de la calidad, en la educación en el curso de los años siguientes». Asimismo, ha señalado que el enfoque de la LOMCE se basa en la «evidencia» y los «éxitos» de otros países que han aplicado reformas.
Sobre las evaluaciones al final de cada etapa, Wert ha advertido de que «no pueden ser más distintas a las reválidas» y ha sostenido que las pruebas intentan «asegurar» que el estudiante pasa de etapa con las competencias «necesarias».
«Insultos» de la oposición
Sobre las intervenciones de los portavoces, el ministro ha señalado que «nada» tiene que decir de los «insultos y las expresiones desconsideradas» de algunos portavoces y que, por lo contrario, se ha subido a la tribuna a «hablar de la educación».
No obstante, Wert ha desafiado al portavoz del PSOE, Mario Bedera, y a la Izquierda Plural, Caridad García Álvarez, a que muestren dónde ha llamado «vagos» a los docentes españoles. «Si no lo demuestran, les pido que tengan la bondad de retirarlo del diario de sesiones», ha aseverado el ministro, entre los aplausos de la bancada ‘popular’.
Tras el debate, y ya en los pasillos del Congreso, Wert se ha dirigido a los medios para afirmar que espera que se sumen más apoyos a la LOMCE en el Senado y que haya una disposición al diálogo «constructiva» por parte de los grupos. «Hoy, lamentablemente, tengo que decir que no ha habido alternativas para mejorar la situación de la enseñanza», ha afirmado.