El presidente del GBB del PNV, Joseba Egibar, ha señalado que el comunicado de ETA dado a conocer este sábado, en el que ratifica la decisión de emprender el sellado e inventariado de sus arsenales, «confirma un camino» y ha destacado que el sellado «no es una tarea técnicamente fácil, al parecer».
En declaraciones a Radio Euskadi, recogidas por Europa Press, el dirigente jeltzale ha valorado el comunicado en el que la organización terrorista señala que «con dicho sellado, pretende garantizar que sus armas, explosivos y dispositivos se encuentran fuera de uso operativo».
A juicio de Egibar, el comunicado «confirma un camino» y ha incidido en que el decomiso, la inutilización o sellado de zulos «no es una tarea técnicamente fácil, al parecer».
«Ese proceso debe ir revestido de un marco de seguridad en el que lo que se haga se verifique, se certifique por parte de las personas o la institución que tenga acreditación para ello», ha añadido.
En este contexto, ha incidido en que el texto de ETA «confirma no solo ya la decisión de hace 28 meses de cese definitivo de la estrategia violenta», sino el hecho de que «si dejas las armas, no las necesitas para nada y hay que proceder a su inutilización».
A su juicio, desde la responsabilidad política e institucional hay que «valorar» el hecho de que ETA, después del anuncio de cese definitivo, «ha intentado por activa y pasiva entablar relación con el gobierno español y francés», al tiempo que ha recordado que «tiempo atrás, cuando ETA mataba, representaciones de los gobiernos se sentaban al otro lado de la mesa, lo que no ocurre ahora».
Egibar ha defendido además que ETA ha visto los últimos años cómo «ha obligado a sentarse al otro lado de la mesa, cuando mataba y asesinaba, y cuando deja de hacerlo, no se le sienta al otro lado de la mesa nadie, lo que puede ser patético».
«Aristas delicadas»
«Ha buscado una forma de verificar su decisión y a eso hay que responder con más responsabilidad de lo que están haciendo ambos gobiernos, que no es que no hablen del tema en un debate político en general, sino que pasan de puntillas porque parece que tiene aristas delicadas», ha indicado, para añadir que «hay que adelantar el final de ETA y para eso procede que se den pasos».
Asimismo, ha entendido que la mayoría de la ciudadanía haya visto el gesto de sellado de parte del arsenal «como un gesto insuficiente» porque «teniendo valor cualitativo, no se ha ubicado en el tiempo en el momento preciso», que era cuando ETA anunció su cese definitivo, lo que le ha hecho «perder sustancia».
«Tras la decisión de ETA confirmada reiteradamente, hay que ofrecer unas mínimas garantías para que quienes actúen con el objetivo de inutilizar esas armas, lo hagan, y después certifiquen y verifiquen», ha añadido.
Por ello, no ha considerado «serio» que los verificadores sean «objeto de seguimiento de todos sus pasos», motivo por el que hay que dotarles «de una estructura mínima de seguridad».
«ETA ha cumplido 54 años y lleva dos con su decisión de cierre. Con todo el sufrimiento que se ha acumulado, creo que sería corresponsable el que actuáramos con cierta altura de miras y no se frivolice, porque una pistola de esas que se exhibió ha hecho mucho daño en este país», ha expresado.
Por último, ha subrayado que si alguien pretende justificar la violencia «hay un problema» y ha incidido en que «detrás de cada vulneración de derechos humanos, hay una responsabilidad, venga de donde venga la violencia practicada».