El líder de CiU en el Parlamento catalán, Jordi Turull, ha restado credibilidad al Tribunal Constitucional (TC) por ser un «órgano político», después de que el Pleno del TC ha estimado la impugnación del Gobierno central contra la declaración soberanista aprobada por la Cámara en enero de 2013.
«El TC no es un órgano jurídico; es un órgano político que decora jurídicamente sus resoluciones», ha afirmado este martes en rueda de prensa, en la que ha preguntado a los magistrados del tribunal qué puede hacer el Parlamento catalán si no tiene capacidad siquiera para pronunciarse sobre las ambiciones de los catalanes.
Ha cargado también contra la composición del alto tribunal, al que ha acusado de tener varios magistrados -el Parlamento catalán no ha llegado a tiempo de recusar a tres de sus jueces- que actúan como «agitadores de la catalanofobia».
Duran lo ve un «error innecesario»
Por su parte, el secretario general de CiU y portavoz de la coalición en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida, considera que el fallo del Tribunal Constitucional es «un error innecesario», si bien ha dicho respetar la decisión del Alto Tribunal.
Ésta es la primera reacción que Duran ha expuesto en su perfil de Twitter, tras conocer que el Pleno del Constitucional ha estimar por unanimidad, aunque sólo de forma parcial, la impugnación presentada por el Gobierno contra esa declaración.
1/2 El TC anul·la la declaració de sobirania del Parlament de Catalunya. Respecto la decisió però la considero un error innecessari. –Duran
— CiU – Duran i Lleida (@ciuduran) marzo 25, 2014
La sentencia rechaza que el pueblo catalán sea «sujeto político soberano», aunque declara constitucionales las referencias del texto a su «derecho a decidir» como una aspiración política, pero desligado del derecho de autodeterminación, que no es reconocido por la Constitución.
«Respeto la decisión, pero la considero un error innecesario», ha escrito el líder democristiano», ha escrito el líder democristiano, recalcando que esa declaración avalada por el Parlament, con el voto en contra del PP, el PSC y Ciutadans, «es política, y no una norma de derecho positivo».
ERC cree que el TC está «corrompido»
El portavoz adjunto de Esquerra Republicana (ERC) en el Congreso, Joan Tardà, considera que la institución vuelve a demostrar que está «corrompida» y que a sus jueces «les puede más la tripa que el cerebro».
En una decisión acordada por unanimidad y dada a conocer este martes, el TC ha rechazado que el pueblo sea «sujeto político soberano», como se sostenía en la declaración avalada por CiU, ERC e ICV, y sólo declara constitucionales las referencias al «derecho a decidir» como una aspiración política, pero desligado del derecho de autodeterminación.
Tardà señala que esta decisión «no debe sorprender» porque el Tribunal Constitucional «es un órgano corrompido en sus funciones», como ha sostenido alguna vez desde la tribuna del Congreso.
Q TC tombi Declaració Sobirania no ha d sorprendre. Ho hem dit des d la tribuna moltes vegades: és un òrgan corromput en les seves funcions
— Joan Tardà i Coma (@JoanTarda) marzo 25, 2014
«A medida que avanzamos en el proceso -sostiene-, en Madrid intensifican la presión/represión. Ahora, han puesto la segunda marcha soltando a los jueces de TC».
Y añade otro comentario, poniendo en cuestión la motivación de los magistrados: «A los jueces del Tribunal Constitucional les puede más la tripa que el cerebro».
No desistirán de su objetivo
El diputado de ICV-EUiA en el Parlament Josep Vendrell ha advertido de que las formaciones favorables a una consulta no van a «desistir» de su objetivo porque están convencidas de que existen marcos legales para celebrarla.
«En ningún caso 12 señores y señoras encerrados en un palacio de Madrid nos podrán hacer desistir de nuestro objetivo de elegir democráticamente nuestro futuro», ha asegurado.
Ha esgrimido que era una declaración política sin contenido jurídico, por lo que el TC actúa de forma errónea al posicionase sobre ella: «No se ha visto nunca que un tribunal pueda opinar políticamente sobre una resolución que tiene carácter político».