«No tenemos sectarismos de pactar con nadie», ha asegurado Pablo Iglesias, el líder de Podemos, y eurodiputado del Parlamento Nacional cuando ha sido preguntado este viernes en una rueda de prensa organizada en el Círulo de Bellas Artes por su disposición a pactar con otras formaciones como IU o Equo, como ya se está barajando como por ejemplo en Madrid para arrebatarle el poder al PP, y también con el PSOE, siempre y cuando «esté de acuerdo en políticas públicas para proteger a los ciudadanos». Según Iglesias, a él no le cabe la más mínima duda de que gran parte de las bases socialistas «comparten» el ideario de Podemos, pero ha advertido sobre los que realmente mandan. «Es probable que a los miembros del PSOE que ahora ocupan puestos en Consejos de Administración ya no les gustemos tanto», ha advertido el también profesor de Ciencia Política de la Universidad Complutense de Madrid, en clara referencia al expresidente socialista Felipe González.
Este mismo jueves, y una vez conocido el descalabro de los dos grandes partido nacionales en las pasadas elecciones europeas, el exlíder del PSOE arremetía contra la formación liderada por Iglesias a la que tildó de «alternativa bolivariana», y sobre la que advirtió la «catástrofe» que supondría si ésta llega al poder. «Como español me apena que una figura política de primer orden haya quedado reducido a una caricatura de sí mismo», ha advertido el ya eurodiputado, visiblemente molesto con la comparación. Según Iglesias, Podemos no defiende ningún modelo concreto «aplicable» a España, sino que bebe de diferentes aspectos que la formación considera que en otros países sí se hace bien, como en Finlandia la educación, o en algunos países de América Latina la «distribución de renta».
El líder de Podemos ha comparecido este viernes ante los medios de comunicación para hacer balance de las últimas elecciones europeas. Unos comicios en los que el «PSOE y PP han recibido el mayor correctivo electoral en la historia reciente de España», ha sentenciado Iglesias, el líder de una formación que en menos de tres meses ha sido capaz de convertirse en la cuarta fuerza a nivel nacional más votada. Durante esta comparecencia, Podemos ha hecho dos anuncios importantes. Por un lado, ha anunciado que el exfiscal Carlos Jiménez Villarejo ha renunciado a su escaño en Bruselas y en su lugar irá al Parlamento Europeo la 'número seis' de la candidatura, Tania González. Y por otro lado, ha aclarado que ellos en Europa cobrarán un sueldo de 1.900 euros mensuales, frente a los casi 14.000 que les corresponden, y que además pedirán al resto del Parlamento que se los igualen. Además, también rechazan cobrar el millón y medio de euros que les correspondería por el resultado electoral del pasado domingo. Sólo recogerán los apenas 100.000 euros que han gastado en la campaña electoral.
Sobre sus intenciones de concurrir también a las elecciones generales, Iglesias se ha mostrado más evasivo. «Toca hacer un buen trabajo en Europa. Les aseguro que esas decisiones no son personales y estarán avaladas por la participación de la gente. No toca ahora hablar de esa cuestión», ha afirmado. Tras el triunfo electoral del 25M, el líder de Podemos llegó a afirmar que sí se veía como candidato para ocupar la presidencia del país, pero este viernes ha rebajado las expectativas. «Es difícil hipotecar mi futuro. Estoy a disposición de Podemos. Lo que se me ha pedido es hacer un buen trabajo en Europa», ha zanjado, no sin antes asegurar que Podemos es capaz de formar en un año y medio un Gobierno que mejore «la situación de nuestro país». «Ya le gustaría a buena parte de los políticos tener gente con la preparación de la gente que forma Podemos», ha exclamado Iglesias.