El Príncipe Felipe ha llamado a instituciones, agentes sociales y económicos, entidades y ciudadanos a anteponer el bien común a sus intereses particulares para superar la crisis que atraviesa el país y para «ampliar el campo de esperanza que se abre ante nosotros» y ha hecho una apelación a conocer y aprender del pasado porque «favorece que las sociedades avancen con paso firme hacia el futuro».
Don Felipe ha pronunciado estas palabras en el Monasterio de Leyre (Navarra), donde preside la entrega del premio Príncipe de Viana de la Cultura, su primera declaración públicas tras conocerse el lunes la intención de su padre, el Rey, de abdicar de la Corona.
El Príncipe de Asturias ha admitido que el día de hoy tiene «una significación especial» tras la decisión tomada por Don Juan Carlos I. «De manera que las circunstancias llevan a que mis primeras palabras después del anuncio de su Majestad tengan lugar en esta querida tierra Navarra, uno de los solares originarios de nuestra patria española», ha añadido.
Tras ello, y «respetando el procedimiento parlamentario iniciado», don Felipe ha expresado su «empeño y convicción» de dedicar todas sus fuerzas «con esperanza y con ilusión a la apasionante tarea de seguir sirviendo a los españoles, a nuestra querida España: una Nación, una comunidad social y política unida y diversa que hunde sus raíces en una historia milenaria».