El dirigente de Izquierda Unida Willy Meyer no ha podido a la presión y ha anunciado este miércoles su dimisión como diputado del Parlamento Europeo por la polémica creada por su participación en un fondo voluntario de pensiones del Parlamento Europeo, formalizado a través de una SICAV en Luxemburgo. Una decisión tomada por «coherencia» pero no por haber cometido una «ilegalidad», ha aclarado el diputado de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares.
Llamazares se ha manifestado en estos términos, en declaraciones a Cuatro, después de que Meyer haya anunciado su decisión. Además, ha recalcado que este asunto afecta a «un conjunto de diputados» y lamenta que Meyer sea «el único que asume responsabilidades». Así, ha admitido que a IU le afecta «en mayor medida» el caso porque es «la única formación política en contra de las SICAV».
En todo caso, Llamazares ha recordado que Luxemburgo no se reconoce como paraíso fiscal porque en tal caso «no tendría dinero público» de la UE y ha advertido de que fondos de pensión puede tener «cualquier empresa grande» sin conocer donde se invierten los fondos colectivos que puede gestionar, por ejemplo, una entidad financiera.
Meyer, que ha convocado a la prensa de urgencia, ha hecho este importante anuncio desde la sede nacional de IU, pocas horas después de que haya aterrizado procedente desde Bruselas, donde se encontraba este martes cuando saltó la polémica desvelada por Infolibre de que varios eurodiputados españoles participaban en un fondo de pensiones voluntario gestionado por una SICAV en Luxemburgo. Conocida esta información, el diputado de Izquierda Unida se dispuso a darse de baja en dicho fondo de pensiones.
«Teniendo en cuenta que las SICAV son entidades que pretenden burlar las obligaciones fiscales de las empresas, el eurodiputado ha decidido darse de baja del mismo», es la explicación que dió Izquierda Unida este martes a través de un comunicado, en el que adjuntaba la carta que el propio Meyer envió al director general de Finanzas y Pensiones de la Eurocámara.
En dicha misiva, Meyer puso en su conocimiento la información publicada, reclamó la parte que corresponde a sus aportaciones y expresó su deseo de darse de baja a partir de este martes de ese régimen voluntario de pensiones, «a sabiendas que la parte alícuota que la institución abonó se mantendrá dentro de ese fondo», pero no ya en su nombre. Un gesto que no fue suficiente.
Willy Meyer llevaba en el Parlamento Europeo desde 2004 y había vuelto a salir reelegido por cinco años más en las pasadas elecciones del 25 de mayo. En su lugar, entrará en la Eurocámara Javier Couso, hermano del cámara de Telecinco asesinado en Telecinco, José Couso. «Ha sido una decisión muy meditada tomada pensando sólo en los afiliados y en una organización que es ejemplar, no quería distorsionar lo más mínimo la atención de las grandes tareas colectivas que tenemos», ha insistido Meyer.
El ya exeurodiputado ha asegurado que desconocía cualquier detalle de este fondo de pensiones, que pensaba que operaba en Bélgica, y nunca pensó que pudiera «terminar» en manos de una Sicav. Además, no ha recibido ninguna prestación por él porque los eurodiputados las reciben una vez que cumplen 63 años. Y pese a ser legal, considera que «la ética a veces está por encima de la ley» y todo lo público «tiene que tener una gestión ejemplar y ejemplarizante». «Cuando se trata de dinero público hay que estar a la altura. Aunque sea legal no lo compartimos», ha resumido.
Meyer, acompañado durante su comparecencia por el coordinador federal de IU, Cayo Lara; por el portavoz en el Congreso, José Luis Centella, y por el coordinador general en Andalucía, Antonio Maíllo, ha asegurado que se marcha «por ética y por coherencia». El exeurodiputado ha negado presiones internas, pero lo cierto es que desde que la noticia saltara este martes, las críticas no se han hecho esperar ni por parte de algunos miembros de la dirección, ni tampoco de la militancia. Según fuentes de IU, este martes tuvo lugar una reunión informal de la cúpula a la que, además del coordinador general, acudió su responsable de Organización, Miguel Reneses.
Según la información desvelada por Infolibre, sería Miguel Arias Cañete, el número uno en las listas del PP en las elecciones del 25-M, el administrador de la SICAV localizada en Luxemburgo. Un fondo en el que también estuvo incluida la actual 'número uno' de los socialistas, Elena Valenciano, como ella misma ha admitid. Ambos partidos han actuado de perfil en esta cuestión. Los socialistas, en boca de la portavoz parlamentaria del PSOE, Soraya Rodríguez, han asegurado que las explicaciones deben de ser dadas por el Parlamento Nacional. Los 'populares', sin embargo, han optado por una actitud más cauta. «Estamos analizándolo y se actuará en consecuencia».
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