Nueve partidos políticos cerraron el ejercicio 2012 en situación de desequilibrio financiero, con más pasivo que activos, una cifra que supone casi la mitad de los que había el año anterior. Ese saldo negativo conjunto se situaba en 42,5 millones, principalmente de formaciones como CiU y La Izquierda Plural (IU-ICV-CHA). Así se recoge en el informe del Tribunal de Cuentas sobre la contabilidad de los partidos políticos en el ejercicio 2012, que acaba de ser remitido a las Cortes y a cuyo contenido ha tenido acceso Europa Press.
La cifra de partidos políticos en situación de desequilibrio venía incrementándose cada año desde 2009, cuando había 10, hasta 2011, cuando llegaron a ser 17, pero en 2012, el año en que se perciben las subvenciones derivadas de las elecciones generales de noviembre, el Tribunal de Cuentas ya sólo señala a nueve formaciones con un saldo conjunto negativo de 42,5 millones.
Unió aumenta su desequilibrio
El partido peor situado es Unió Democràtica (UDC), el socio democristiano de CiU que lidera Josep Antoni Duran i Lleida, que acumulaba un saldo negativo de 12,48 millones, uno más que el año anterior. La coalición CiU contaba por su parte con un saldo negativo de 9,22 millones, que consiguió rebajar en casi un millón de euros su desequilibrio de 2011.
Por su parte, Izquierda Unida cerró 2012 con un saldo negativo de 13,10 millones de euros, un millón menos de lo que se detectó el año anterior. Aparte figuran los datos de su federación catalana, Esquerra Unida y Alternativa (EUiA), que contaba con 77.198,88 euros de pasivo por encima de sus activos.
Además, Iniciativa per Catalunya (ICV) presentaba un desequilibrio de 3,13 millones, mientras que Chunta Aragonesista (CHA), el tercer socio del grupo parlamentario de Izquierda Plural en del Congreso, tenía un saldo negativo 154.786,73 de euros.
El BNG, otros 3,79 millones en rojo
La lista se completa con el BNG, con un balance negativo de 3,79 millones; el Bloc Nacionalista Valencià (BNV), uno de los principales miembros de la coalición Compromís, con un saldo en contra de 729.077,18 euros; y Geroa Bai, con 27.311,52 euros.
Para todos estos partidos, el Tribunal de Cuentas recomienda «ajustar sus actividades económicas con objeto de alcanzar el necesario reequilibrio patrimonial, habida cuenta de que los ingresos públicos representan la mayor parte de los ingresos registrados».
El PP gastó menos que en 2011
El PP tuvo unos gastos en el año 2012 por importe de 80,1 millones de euros, lo que supuso un recorte de casi el 40% con respecto al ejercicio anterior, en el que se habían celebrado elecciones municipales, autonómicas y generales. El 68% de ese gasto, 55 millones, corresponde a las sedes territoriales del partido y el resto, 25 millones, a gastos de la sede central.
Ese año, el primero completo del Gobierno de Mariano Rajoy, el PP ingresó 89 millones de euros y gastó 80, por lo que terminó con un resultado positivo de 9 millones. Así figura en el informe del Tribunal de Cuentas. Este partido tiene su financiación bajo investigación de la Audiencia Nacional a raíz del llamado 'caso Bárcenas', que indaga en el origen del patrimonio amasado por el extesorero y exgerente del PP Luis Bárcenas y que apunta a la existencia de una 'caja b' en el partido.
El Tribunal realiza su trabajo a partir de la información que los partidos le dan y audita los ingresos y gastos de un ejercicio económico. Como en otros ejercicios, el auditor censura que las cuentas consolidadas no incluyen las de las organizaciones locales ni de los grupos municipales, sino que se queda en el nivel provincial.
74 millones de financiación pública
El grueso de los ingresos 'populares' procedieron de la financiación pública, 74 millones de subvenciones del Estado y de gobiernos autonómicos, aportadas por grupos parlamentarios y por la celebración de procesos electorales. El PP además obtuvo 15,6 millones de ingresos privados, 12,5 de ellos aportados por los afiliados y los cargos públicos a través de sus cuotas. El resto, se reparte entre donaciones (734.000 euros) y otros ingresos financieros, de arrendamientos o ingresos extraordinarios por valor de casi 2,4 millones procedentes.
El capítulo de gastos ascendió en 2012 a 80,1 millones de euros. De ellos, 45 millones se dedicaron a servicios exteriores tanto de las sedes territoriales como de la central y por gastos electorales.
Faltan contratos
Apunta el tribunal que al verificar estos saldos «no han sido aportados 34 contratos y presupuestos solicitados». Explica que el PP ha alegado que no es preciso un documento contractual para regular las relaciones con empresas suministradoras, pero el Tribunal señala que así no se asegura «un correcto control interno».
Los gastos de personal absorbieron otros 28,9 millones de euros, el 36 por ciento del total y un 17 por ciento menos que el año anterior. De esa cantidad, 11 millones fueron gastos de personal de la sede central y el resto, de las territoriales. En total, trabajaban para el PP en 2012 443 personas.