La ceremonia de proclamación de Felipe VI como nuevo Rey de España que se celebró el pasado 19 de junio en el Palacio del Congreso costó a las Cortes Generales un total de 132.036,58 euros, un gasto «austero», en palabras de su presidente, Jesús Posada, que sale de la cuenta de remanentes que anualmente van acumulando las Cámaras con las partidas presupuestarias no ejecutadas.
Así se recoge en el presupuesto que estudió el pasado martes la Mesa del Congreso y cuya factura, desglosa los distintos actos de esa jornada en sede parlamentaria.
Así, de los más de 132.000 euros, la mayor parte, 55.128,25 euros, se destinó a desmontar la zona de Presidencia del Congreso para colocar una tarima especial desde la que Don Felipe fue proclamado nuevo Monarca, rodeado de su familia y de las principales autoridades del Estado. A ello se añaden otros 11.979,61 euros para trabajos extra en esa plataforma y la colocación del tapete donde reposó la corona y el cetro reales.
La segunda partida más importante, de 36.358 euros, se destinó a abonar complementos y horas extra al personal de las Cortes Generales que trabajaron ese día 19 de junio, que era festivo en Madrid. La Cámara Baja se hará cargo de 26.288,80 euros y el Senado pagará otros 10.069,20 euros.
Otros 8.820,90 euros se gastaron en montar y desmontar el dosel que se instaló en la Puerta de los Leones, y 4.564,57 euros en 31 pasadores de cordón y en las medallas que ese día lucieron los miembros de las Mesas del Congreso y del Senado y los portavoces parlamentarios con el nuevo emblema de Felipe VI.
Además, el documento contempla que por cambiar los sillones del hemiciclo para que cupieran también los senadores se abonó 3.007,10 euros, y otros 2.597,40 euros por barnizar y elevar la altura del atril desde el que Felipe VI pronunció su discurso como nuevo Monarca, así como por restaurar la mesa isabelina de la Sala de la Reina.
El receso del café
Asimismo, el alquiler y montaje de una carpa para el control de acceso de los periodistas supuso un importe de 1.875,50 euros, la pausa para el café que se tomaron las autoridades se elevó a 1.074,70 euros y la colocación de las pantallas que se instalaron para que se pudiera seguir la sesión solemne en diversas dependencias del Congreso tuvo un coste 923,77 euros.
Entre otros gastos destaca los 410,63 euros que supuso el servicio de agua para la prensa; los 162,43 euros que se pagó por la climatización y los 125 euros que se abonaron por dos centros de flores que se colocaron en el Salón de Plenos.