Dos menores y un adulto han resultado muertos este lunes al salirse de la vía el vehículo en el que viajaban en el kilómetro 21.900 de la carretera N-121-A, a la altura del cruce de Lantz.
Otros dos adultos y un niño, ocupantes del mismo vehículo, han resultado heridos de diversa consideración y trasladados en helicóptero y dos ambulancias al Complejo Hospitalario de Navarra, según ha informado el Gobierno foral en un comunicado.
El suceso ha tenido lugar a las 16.30 horas, y hasta el lugar se ha trasladado el director general de Interior, Patxi Fernandez, quien, tras lamentar el trágico suceso, ha manifestado que por el momento se desconocen las causas del mismo, aunque todo apunta a un fallo humano, ya que el punto en el que se ha producido se trata de una recta con visibilidad, en un tramo sin complicaciones y no ha intervenido ningún otro vehículo.
Igualmente ha resaltado la coordinación de los servicios de emergencia, que ha permitido la rápida evacuación de los heridos y su traslado al Complejo Hospitalario de Navarra.
Tras recibir el aviso, SOS Navarra ha movilizado al lugar a bomberos del parque de Trinitarios de Pamplona, médico y ATS de Ultzama, helicóptero medicalizado, ambulancias y Policía Foral, que se ha hecho cargo del atestado y de la investigación de las causas.
La circulación ha permanecido cortada en ambas direcciones varios minutos tras el accidente y la Policía Foral se ha encargado de regular el tráfico que ha sido desviado por la A-15.
El vehículo, un monovolumen con seis ocupantes, viajaba en dirección Pamplona cuando se ha salido de la vía por el lado derecho, chocando posteriormente contra un árbol y desplazándose varios metros hasta una campa adyacente.
Los fallecidos son el conductor del vehículo y dos menores, de 6 y 8 años de edad, y sus cuerpos ya han sido trasladados al Instituto de Medicina Legal.
En cuanto a los heridos, se trata de dos mujeres y un niño de 6 años. Una de las mujeres ha sido trasladada en un helicóptero medicalizado en estado muy grave; la otra mujer ha sufrido un traumatismo torácico y abdominal, con pronóstico menos grave, y el niño, sin traumatismos aparentes y con pronóstico leve. Ambos han sido trasladados en ambulancia.
Los seis ocupantes del vehículo eran miembros de una misma familia residente en Pamplona, a donde regresaban después de las vacaciones.