En la calle Federico Rubio y Galí la lectura de los periódicos estas semanas es un sapo. El escurridizo pederasta de Ciudad Lineal está jugando con una ventaja inesperada: que los pasos sigilosos que dan los policías están siendo aventados por lo que ellos llaman “los de arriba”. Tanto, que ayer el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, alertó de que “las filtraciones son muy contraproducentes”. Muy serio, a pocos pasos de la delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes, con cara de circunstancias, aseguró que el dispositivo, para ser eficaz, “no debe ser público”. Cifuentes explicó hace unos días a la prensa con detalle cómo se iba a aumentar el dispositivo de cámaras de videovigilancia en Ciudad Lineal. Ha habido más filtraciones.
A pocos metros de Cristina Cifuentes, Cosidó dijo que el dispositivo, «para ser eficaz, no puede ser público»
Un veterano policía explica a estrelladigital.es que los nervios de los políticos son “habituales, un verdadero engorro”. “Las filtraciones nunca salen de los de abajo, de los operativos, sino de los de arriba, en sus comidas con directivos de la prensa”. Mientras la alarma social se dispara en Madrid ante la aparente impunidad del pederasta de Ciudad Lineal, algunos políticos se quedan sin respuestas. Y muchos tienen aspiraciones electorales a corto plazo. “Siempre ha pasado, pero esta vez nos han hecho daño”, explica este policía de la Jefatura Superior de Madrid.
Especialmente dañino ha sido que se filtrara a ciertos medios el hecho de que haya una docena de sospechosos ya “centrados”, según la terminología policial. Del mismo modo, las indiscreciones sobre los cambios de coche del pederasta han sido otro sapo en las mesas de Federico Rubio y Gallí, sede de la Jefatura Superior de Madrid. “Son datos que quedan muy bien y dan la sensación de que se hacen cosas, pero son palos en la rueda de nuestra investigación”, explica otro agente a ESTRELLA DIGITAL.
Varios grupos de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) provincial están enfrascados en apoyar al Servicio de Atención a la Familia (SAF). El hecho es que los agentes del SAF llevaban meses trabajando sin medios, ni ordenadores ni vehículos adecuados. La alarma llevó a mover ficha y poner a agentes que están investigando asuntos de droga y crimen organizado como apoyo. Pero el trabajo contra traficantes y mafias está ahora colapsado, por falta de dotación de policías.
Lo cierto es que la presencia policial –de uniforme y de paisano– en Ciudad Lineal es más que notoria. Algún agente de la investigación sonreía con sorna al ver cómo se había hecho trasladar a la Caballería de la Policía al barrio y había un fotógrafo de un medio de cabecera de ciertos políticos para reflejarlo: “Las elecciones están cerca y hay políticos con mucha ambición”, asegura.
Lo cierto es que la Policía dispone de perfiles claros del pederasta, al que consideran un individuo inteligente, perseverante, “pero con pulsión por delinquir”. De hecho, la investigación ha retomado hilos que quedaron perdidos y a los que a lo mejor no se dio importancia en su momento y que los hechos de Ciudad Lineal han dado otra luz.
La Policía dispone de perfiles claros del pederasta
Hace ocho meses la Policía y la Guardia Civil estuvieron tras la pista de un coche Seat León de color blanco, cuyo conductor había tenido escarceos de naturaleza pederasta con menores. Su zona de actuación eran ciudades del noroeste de Madrid, con mucho porcentaje de población joven. El pederasta no tuvo éxito en sus intentos y se le perdió la pista.
Hace ocho meses la Policía y la Guardia Civil estuvieron siguiendo la pista de un pederasta en el noroeste de Madrid que usaba un seat león blanco. Ahora se relaciona este hecho con los ataques del pederasta de Ciudad Lineal
Fue poco después cuando empezaron los secuestros exprés de menores en Ciudad Lineal. Pero no por eso los policías contaron con más medios. Ha sido cuando se ha identificado el problema como un foco de atención en los medios de comunicación, cuando han llegado los medios y las rondas de fotos. “Está muy bien hacerse la foto, para eso son políticos, pero ya nos comimos el error del 22-M donde hirieron a los compañeros por las órdenes de los políticos y ahora no nos vamos a comer la investigación porque quieran quedar bien”, asegura un veterano agente de las unidades de investigación.