La táctica incluye la sorpresa y los golpes de mano. Así se presentaron en la Librería Blanquerna el 11 de septiembre del año pasado, en un acto de la Generalitat catalana en honor de la Diada. Así aparecieron en el barrio de Tetuán, con audacia. Al menos uno de los colaboradores de la casa ‘okupa’ nazi estuvo detenido por los incidentes de la Diada de 2013 en Madrid.
A Tetuán llegaron a mediados de agosto y ocuparon un edificio en la calle Juan de Olía, en el corazón del barrio inmigrante. Bautizaron la nave con el nombre del fascista español Ramiro Ledesma y anunciaron que ofrecerían amparo, ayuda y alimentos a los vecinos de la zona siempre y cuando presentaran un documento de identidad que acreditara que son españoles. Sin embargo, la presencia del grupúsculo neonazi, que se enorgullece de las comparaciones con el partido griego de ultra derecha, Amanecer Dorado, provocó la inquietud entre los residentes del distrito que incluso se movilizaron en diversas ocasiones para exigir su desalojo.
Desde su llegada se produjeron diversas agresiones. La primera de ellas tuvo lugar hace aproximadamente tres semanas. Según relata un vecino a Estrelladigital.es, un chico se encontraba en el barrio repartiendo información sobre el caso ‘Alfon’, el joven detenido durante la huelga general del pasado 14 de noviembre de 2012, cuando fue brutalmente atacado por un grupo de extrema derecha. “Los neonazis agredieron a un antifascista que se encontraba haciendo campaña por la absolución de ‘Alfon’. Le propinaron una paliza y presentó una denuncia. Fue entonces cuando se pidió a la Administración que los echaran porque se generó alarma vecinal”. Días después otros dos hombres, uno de origen chileno y otro procedente de República Dominicana también denunciaron haber sufrido ataques en Tetuán por parte de los neonazis, aunque finalmente retiraron las acusaciones. Por otro lado, el vecino, que prefiere no revelar su nombre, asegura que las informaciones publicadas sobre ataques de grupos antifascistas a la casa okupa nazi “son falsas” porque lo que hay en el barrio es “miedo a esa gente”.
De hecho, según confirman a Estrelladigital.es miembros de la organización neonazi, uno de los colaboradores del ‘Hogar social Ramiro Ledesma’ es Víctor Diego Villalba, veterano del partido Alianza Nacional, con antecedentes por hurto y que fue detenido por el asalto a la librería Blanquerna en la calle Alcalá el pasado mes de abril. Villalba fue uno de los asaltantes que irrumpieron de forma violenta entre golpes, gritos y amenazas para boicotear un acto por la Diada. Se adentraron hasta el escenario dónde arrojaron la ‘senyera’ y mostraron banderas con símbolos radicales de extrema derecha.
Por el momento y a pesar de las agresiones que se han producido en el distrito y de los vínculos de los colaboradores de la ‘okupa’ nazi con partidos de ultra derecha, no ha habido detenciones. Además, aunque el juez de instrucción número 48 de Madrid ordenó su desalojo el pasado viernes, la organización aseguró a este diario que tienen intención de continuar con sus actividades y a ser posible en el mismo barrio. Por otro lado, también corroboraron que un empresario les ha cedido un además de financiación económica.
“Estrategia del Gobierno”
Por otro lado, tal y como informó este diario, miembros del colectivo ‘La Enredadera’, sede de movimientos sociales y antifascistas, que se encuentra a 600 metros de la ‘okupa’ nazi, explicaron en un comunicado que tienen la “sospecha” de que se trata de una estrategia por parte del Gobierno para “matar dos pájaros de un tiro”. Creen que la intención de la delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes es “librarse de un proyecto de más de cinco años, enraizado y muy bien valorado por la comunidad”.
“En las últimas semanas se ha presentado este asunto como una batalla campal entre dos centros sociales de ideología opuesta, y queremos hacer hincapié en que esto es absolutamente falso. No se trata de un conflicto entre dos edificios, sino de un barrio que rechaza frontalmente la llegada de este Hogar Social, porque supone un retroceso en la construcción de una convivencia intercultural sana para Tetuán”, recalca el comunicado.