La utilización de bases españolas para el tránsito del contingente que va a enviar Washington a África occidental para luchar contra la epidemia de ébola será uno de los principales asuntos que abordarán este viernes, el ministro de Defensa, Pedro Morenés, y su homólogo estadounidense, Chuck Hagel, en la reunión que tienen prevista y en la que también tratarán la participación española en la coalición internacional contra el Estado Islámico (EI), que consistirá en el envío de instructores para adiestrar al Ejército iraquí.
Las bases españolas, previsiblemente las de Morón de la Frontera (Sevilla) y Rota (Cádiz), serían utilizadas por el Ejército norteamericano para el repostaje de sus aeronaves y descanso de sus tripulaciones en los vuelos que tengan que realizar para trasladar el material necesario al continente africano.
Según la Embajada norteamericana en Madrid, la operación que ha previsto Washington, anunciada por el presidente Barack Obama a mediados de septiembre, consiste en levantar en África las instalaciones adecuadas para el combate del ébola, por lo que los vuelos que pasarían por España servirían para transportar el material necesario para ello y no para el traslado ni de médicos ni de enfermos ni de pacientes con síntomas.
Pese a todo, fuentes militares han indicado que el Gobierno ha planteado en las negociaciones previas con Estados Unidos sobre este asunto la obtención de un certificado que garantice que los vuelos cumplan todos los protocolos de seguridad para evitar cualquier riesgo.
España y Estados Unidos llevan semanas negociando el uso que haría la Administración norteamericana de las bases y todavía no hay nada cerrado, aunque todo este proceso podría culminar mañana en la reunión en Washington de los responsables de Defensa de ambos países.
Convenio de cooperación
Eso sí, las fuentes consultadas han indicado que Washington no tiene por qué pedir autorización a España para utilizar las bases de Morón y Rota para este fin, ya que el uso de las instalaciones es compartido por los dos países, según establece el Convenio sobre Cooperación para la Defensa, vigente desde 1988.
Pero dado que la operación norteamericana contra el ébola en África va a ser importante, llegando a movilizar a unos 3.000 efectivos, las fuentes han subrayado que Washington ha mantenido informado al Gobierno español de sus intenciones desde el principio y por eso desde Madrid se han reclamado todas las garantías de seguridad.
Además del certificado de seguridad, otro de los puntos concretos que Morenés y Hagel abordarán mañana es si Estados Unidos informará a España de la utilización de las bases vuelo a vuelo o si será un acuerdo general para toda la operación.
Tras conocerse la intención de Estados Unidos de utilizar las bases, los ayuntamientos de Morón y Rota exigieron «transparencia e información» al Ministerio de Defensa para evitar alarma social entre la población debido a un asunto tan sensible como es la crisis del ébola.
Mientras, los trabajadores civiles de ambas bases han mostrado su preocupación por que haya «fallos en el protocolo», de ahí que el comité de empresa de la sociedad que gestiona los servicios civiles de Morón vaya a mantener también mañana una reunión con un representante del ministerio.
Nueva misión internacional
El otro asunto más importante que se pondrá sobre la mesa este viernes en Washington será la aportación que hará España a la coalición internacional que lidera Estados Unidos para contener el avance del Estado Islámico en Irak y Siria.
Esta nueva misión de las tropas españolas, anunciada por Morenés el pasado viernes tras su aprobación por el Consejo de Ministros, consistirá en el despliegue de unos 300 militares que se encargarán de formar y entrenar a personal del Ejército iraquí, concretamente en desminado y operaciones especiales.
Precisamente esta semana ha tenido lugar en el Mando Central de la operación, ubicado en la localidad norteamericana de Tampa (Florida), una reunión de la coalición sobre las aportaciones que hará cada país. En el caso de España, todavía se desconoce el lugar exacto del despliegue y cuándo tendrá lugar.
Los gobiernos español y norteamericano han estudiado la posibilidad de que los 300 militares lleven a cabo la instrucción del Ejército iraquí fuera del país árabe, concretamente en un país de la zona aliado de Estados Unidos.
Instalaciones para una brigada
Pero teniendo en cuenta que el objetivo de la misión es el adiestramiento a nivel de brigada –unidad militar que oscila entre los 4.000 y los 6.000 efectivos–, las instalaciones en las que se realice deben estar capacitadas para ello, así como el material del que dispongan. En caso de que el despliegue sea finalmente en territorio iraquí, es prácticamente seguro que la localización esté situada en el sur, ya que en esta zona no hay presencia del Estado Islámico.
El ministro de Defensa solicitará al Congreso el próximo 22 de octubre la autorización necesaria para poner en marcha la misión. El PP ya tiene asegurado al menos el respaldo del primer partido de la oposición.