El coordinador general de IULV-CA, Antonio Maíllo, ha avisado este martes de que la «deslealtad» de la presidenta andaluza, Susana Díaz, al romper el pacto de gobierno, hará difícil que los militantes de IU vuelvan a aceptar un acuerdo con el PSOE, pero ha reconocido que descarta un pacto 'a la extremeña' para dejar gobernar al PP: «Nosotros nunca vamos a permitir que el PP entre en Andalucía».
En declaraciones a la Ser, Maíllo ha acusado al PSOE de «enseñar la patita de su derechización» porque, «a los cinco minutos de romper con IU» alcanzó un acuerdo con el PP en el Parlamento andaluz para renovar a parte de los miembros de la Cámara de Cuentas andaluza, «blindándolos para 10 años». «Ayer hubo un pleno vergonzoso en el Parlamento andaluz«, ha denunciado.
Por eso, se ha preguntado si ese acuerdo es la respuesta de los dos partidos mayoritarias a otra de las conclusiones que adoptó IU en su reciente Asamblea de balance, la petición de una comisión de investigación parlamentaria sobre todo los casos de corrupción, no sólo el de los cursos de formación sino también las ramificaciones andaluzas de Gürtel y de los 'papeles de Bárcenas', la pieza separa que alude a la supuesta contabilidad B llevada por el extesorero del PP Luis Bárcenas.
Maíllo ha acusado a Díaz de «cinismo», por achacar a una supuesta «inestabilidad» la ruptura del pacto de gobierno cuando, en realidad, están aprobados los Presupuestos para 2015, que es la herramienta que permite ejecutar las políticas.
«Lo llaman inestabilidad cuando quieren decir insumisión», ha denunciado el dirigente de IU, que ha recalcado que su participación en el Gobierno andaluz no era «para satisfacer aspiraciones personales sino para contribuir al cambio en Andalucía y contribuir a resolver problemas muy graves».
Díaz ha buscado «excusas»
A su juicio, es posible que el PSOE tuviera la decisión de romper tomada de antemano, porque a la hora de la verdad no querían llevar a cabo las leyes pactadas con IU y sólo haya buscado «excusas» para romper.
De hecho, ha desvinculado la ruptura de la decisión de IU de abrir la puerta a un referéndum sobre la continuidad del pacto de gobierno y también del hecho de que el candidato de IU a la Moncloa, Alberto Garzón, tachase de «indecencia» que la presidenta andaluza dijese que no era oportuno un viaje de su vicepresidente, Diego Valderas, a los campamentos saharauis «vinculándolo con el yihadismo».
Sobre el referéndum entre sus militantes para continuar o no con el pacto de gobierno, ha puntualizado que IU no había decidido convocarlo, sino facultar a su dirección para evaluar si la Junta estaba impulsando las leyes que para ellos eran prioritarias –banca pública, renta básica, ley de agricultura y ley de violencia de género–. De no ser así, la dirección podría convocar esa consulta entre sus militantes.