El Mando de Operaciones del Estado Mayor de la Defensa ha designado a dos oficiales de Artillería para que investiguen junto al ejército israelí el ataque que el pasado 28 de enero causó la muerte del cabo español Francisco Javier Soria Toledo en Líbano.
Según ha informado el Ministerio de Defensa en un comunicado, ha designado a dos oficiales del Regimiento de Artillería de Campaña RACA-11, con sede en Burgos, para participar en la Comisión de Investigación conjunta con las Fuerzas Armadas de Israel que tratará de esclarecer lo sucedido durante los incidentes del pasado miércoles en el Líbano, que causaron la muerte del militar español.
Asimismo, Defensa ha señalado que la comisión investigadora iniciará su viaje una vez que se cierren los detalles de coordinación con las autoridades de Israel a lo largo de este fin de semana.
Acuerdo entre Rajoy y Netanyahu
La decisión de enviar a los dos oficiales de Artillería se produce después de que este viernes el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, telefoneara al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para acordar poner en marcha una investigación conjunta de los dos países para esclarecer lo ocurrido, así como colaborar con la investigación que desarrolla Naciones Unidas.
Netanyahu también subrayó su agradecimiento por la presencia de militares españoles en la FINUL, al igual que su compromiso con la paz en la zona. Por su parte, el presidente del Gobierno, que expresó sus condolencias por los soldados israelíes fallecidos, agradeció al primer ministro israelí su llamada y su disponibilidad para llevar a cabo la investigación conjunta.
El cabo español Francisco Javier Soria Toledo falleció el pasado miércoles día 28 de enero durante un contraataque del Ejército israelí contra posiciones de la milicia chií Hezbolá en el sur de Líbano. El soldado, de 36 años, participaba en la misión 'Libre Hidalgo' desde el pasado mes de noviembre y ésta era su segunda participación en la misión internacional de Naciones Unidas UNIFIL, Fuerza Provisional de Naciones Unidas en Líbano.
La presencia española en esta zona se remonta a 2006, tras el conflicto entre Israel, Hezbolá y Líbano que se saldó con la muerte de 1.200 libaneses y 165 israelíes. Actualmente, el contingente español cuenta con 586 soldados desplegados en la misión de UNIFIL. Su zona de despliegue se concentra en la franja sur de Líbano, que limita con Israel y Siria y está próxima a varios enclaves en conflicto, como las granjas de la Shebaa y los Altos del Golán.
La presencia militar española en Líbano contabiliza desde 2006 un total de 13 fallecidos. El incidente más grave ocurrió en junio de 2007, cuando un artefacto hizo explosión al paso de un blindado BMR español, causando seis muertes.