El coordinador federal de IU, Cayo Lara, protagonizó una acalorada intervención a puerta cerrada ante la Presidencia Federal de la organización el pasado domingo, a la que abroncó por los conflictos internos que vive la organización desde los últimos meses y a la que reclamó «paz» y «reflexión» de cara a las próximas elecciones autonómicas y municipales.
«Vamos a reflexionar porque si no nos estamos matando y nos estamos comiendo», avisó Lara ante los máximos dirigentes de la coalición de izquierdas durante su discurso, cuya grabación ha difundido este martes el digital Infolibre, y que recoge Europa Press.
Tras comenzar su intervención reconociendo sentirse «avergonzado» del «cainismo» que, a su juicio, hay en la organización «desde hace mucho tiempo», Lara lamentó que la coalición haya pasado de tener un 13% de intención de voto de media en España antes de las europeas a la situación actual, en la que peligra el grupo parlamentario. «Si no tenemos grupo parlamentario nos vamos al garete», advirtió.
«¿Creéis que podemos estar cinco meses pegándonos de hostias en esta organización con mensajes negativos y decir que queremos tener un porcentaje de subida de voto? ¿Pero quién se ha creído eso?», se preguntó Lara. «No se puede continuar así. Esto es una vergüenza de organización y aquí todo el mundo tiene todas las razones», continuó.
La gestión de las «malditas tarjetas black» en la federación madrileña, que se negó a expulsar a sus portavoces en la Asamblea de la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de la capital, Gregorio Gordo y Ángel Pérez, y los problemas con los excandidatos Tania González y Mauricio Valiente, también en Madrid, que acabaron con su salida del partido, son algunos de los motivos que, según Lara, han contribuido a la generar la situación actual.
«Vamos a ver si somos capaces de llegar con un poquito de paz a las elecciones», reclamó, para insistir en que con este tipo de conflictos se están «destruyendo», y ello no ayuda a hacer frente al reto que representa el surgimiento de Podemos en el mapa político español, tras su irrupción en las pasadas elecciones europeas.
A este respecto, Lara defendió que no cree que la formación de Pablo Iglesias sea «el sujeto de cambio y transformación de este país» y advirtió a los dirigentes de su organización de que están «compitiendo». «Quien nos está rebañando los votos se llama Podemos, nos guste o no, y si no reaccionamos de otra manera tenemos un problema muy serio», añadió.
«Queda tiempo»
«Han venido las cosas como han venido. Si no estuviera Podemos hoy estaríamos en un 16-18%, y con la vieja guardia, pero ha venido Podemos, limpios, dando caña a una organización que tenemos mochila, para lo bueno y para lo malo», advirtió, al tiempo que reconoció, no obstante, que todavía «queda tiempo».
Así, manifestó que espera que todavía haya tiempo «para acuerdos, para participar, para sumar». «Vamos a darnos una tregua hasta que pasen las elecciones», apostilló, para añadir que si finalmente hay acuerdo para celebrar una Asamblea Extraordinaria antes de noviembre, se hará, y será en ella en la que se decidirá sobre la «unidad popular» y sobre su futuro como organización.
«Pero yo pido un acuerdo ahora y ya, para llegar a las elecciones autonómicas y municipales, que lo tenemos muy difícil porque a Podemos le podremos llamar todo lo que queramos a las puertas, pero no quieren hablar de convergencia con nosotros para las autonómicas, porque tienen su hoja de ruta y han dicho que somos un lastre», apuntó.
«Vamos a mirarnos un poco. Yo sí quiero seguir levantándome cada mañana y seguir reconociéndome en el espejo, y me sigo reconociendo. Pero yo no estoy pensando que otro va a ser el actor de este país del cambio y la transformación revolucionaria. No. Yo sigo pensando que nosotros somos eso, y si no somos eso, ¿Qué pinto yo aquí? ¿Para qué llevo aquí toda mi vida?», concluyó Lara.