El buque pesquero con bandera rusa 'Oleg Naydenov' se ha hundido este martes por la noche a 15 millas de las costas de Gran Canaria, concretamente en la localidad de Maspalomas, y a una profundidad de 2.400 metros. El barco lleva en su interior con cerca de 1.400 toneladas de fuel, 30 de gasoil y 65 de lubricante. La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, está coordinando la actuación del Ejecutivo ante el hundimiento del pesquero, según ha informado este miércoles en los pasillos del Congreso la portavoz parlamentaria de Coalición Canaria, Ana Oramas.
«La preocupación son los 1.500 toneladas de fuel que tiene el pesquero», ha admitido la diputada canaria. «Vamos a ver si en coordinación podemos garantizar que no haya contaminación en las playas de Canarias porque eso sería un terrible desastre natural y podría afectar a una zona turística importantísima», ha añadido.
La delegada del Gobierno en Canarias, María del Carmen Hernández Bento, ha señalado que el riesgo de que se produzca un vertido «es muy muy pequeño» y ha negado que se haya buscado que el pesquero ruso se hundiera, subrayando que «se intentó por todos los medios salvar el barco». Para investigar todas las causas indicó que se ha abierto un expediente informativo.
La delegada indicó que debido a que «nunca se puede hablar de riesgo cero» y con el fin de tener riesgos «menores» se tomó la decisión, «por parte de Capitanía Marítima, de sacar el barco y dirigirlo hacia el Sur de Gran Canaria, a unas 30 millas al Sur de Gran Canaria».
Por otro lado, Hernández Bento aseguró, ante las críticas desde el Gobierno de Canarias de que no se les ha informado, que el Capitán Marítimo ha estado a disposición, al igual que ella misma. «No existe ningún problema de transparencia. Hemos mandando una nota de prensa», apostilló. Asimismo, afirmó que el Gobierno central «toma todas las medidas que son necesarias, no siempre son fáciles», si bien añadió que en este caso se trata de un «hecho sobrevenido, no es responsabilidad del Capitán Marítimo, que se produzca este incendio».
Además, agregó, en relación con la polémica que hubo en su momento por los sondeos petrolíferas, que en Canarias debido a su posición geográfica «los riesgos no iba a venir de una prospección de investigación que estaba a 60 kilómetros. El riesgo cero no existe en ningún aspecto de la vida pero el tráfico de buque de gran tonelaje, trasladando fuel y combustible, es muy grande» en las islas.
Medios
Salvamento Marítimo ha movilizado un avión Sasemar 305, el buque Miguel de Cervantes, la Guardamar Talía, el remolcador Punta Salinas y un total de tres barcos a la zona donde se ha hundido el pesquero. En este sentido, el remolcador se mantiene en la zona del hundimiento y por el momento no aprecia contaminación en la zona.
Este buque tienen 56 metros de eslora, 10.300 C.V. de potencia y gran maniobrabilidad. Su capacidad de recogida es de 290 m3 y dispone de brazos de recogida de contaminación con bombas de aspiración, barreras de contención, skimmers y tanques de almacenamiento a bordo.