La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, no es de las que se echa atrás cuando llega la hora de salir a bailar. Así lo demostró en la noche del pasado miércoles cuando en una caseta de la Feria de Abril se arrancó a bailar unas sevillanas.
Sin necesidad de llevar traje de flamenca, la vicepresidenta sorprendió a todos los allí presentes, entre los que estaban el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, y el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, cuando al empezar a sonar unas sevillanas le ‘robó’ el mantón a una amiga y lo dio todo en la pista de baile.
De esta forma, Sáenz de Santamaría trató de desconectar tras una dura mañana en el Congreso de los Diputados, en una sesión de control en la que quizás por un ‘lapsus’ pronunció las palabras prohibidas en el PP: ‘amnistía fiscal’. Algo que Cristóbal Montoro y el resto del Gobierno habían cuidado mucho en evitar hasta entonces.
Parece que los bailes de sevillanas se están poniendo de moda entre las políticas, ya que un día antes fue la líder de Podemos en Andalucía, Teresa Rodríguez, quien protagonizó unas sevillanas de protesta para apoyar a un grupo de subcontratados de Telefónica en huelga.