Juan Carlos Monedero abandona la cúpula de Podemos. El anuncio oficial no lo ha hecho él, sino Pablo Iglesias, el líder de la formación. «Ha presentado su dimisión y yo se la he aceptado», ha anunciado Iglesias durante la presentación del candidato de la formación a la presidencia de la Comunidad de Madrid, José Manuel López, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. El ideólogo y cofundador de Podemos dimite de los órganos de dirección del partido. No lo hizo hace unos meses, cuando explotó el escándalo sobre su empresa 'Caja de Resistencia Motiva 2' que le obligó a presentar una declaración complementaria en Hacienda. ESTRELLA DIGITAL fue el primer medio en publicar que la sociedad de Monedero había facturado en sólo tres meses 425.000 euros. Sin embargo, ha decidido tirar la toalla ahora, pocas horas después de reconocer en una entrevista concedida a Radiocable que se sentía «traicionado» y «engañado» por la «concepción general de la política» y advertir sobre Podemos que pese a ser «lo más decente» que hay, «a veces se parecía a los que queremos sustituir».
«Podemos debe regresar a sus orígenes del 15M y recuperar la frescura que nos llevó a nacer», reconocía amargamente el profesor universitario y pieza clave del partido al periodista Fernando Berlín. Monedero ya avisó este martes que en las próximas semanas decidiría sobre su futuro político. Y parece ser que ya ha tomado la decisión: sigue «comprometido» con el partido, pero abandona su dirección. Así lo ha confirmado a través de su cuenta oficial de Twitter, pocos minutos después de que lo anunciara Iglesias. Un mensaje con el que ha intentado despejar dudas sobre discrepancias internas o presiones. Y en el que ha querido reivindicar por encima de todo su amistad con el secretario general de la formación.
Le he presentado a mi amigo Pablo la dimisión en la dirección. Siguen firmes mi amistad con alguien tan grande y el compromiso con Podemos.
— Juan Carlos Monedero (@MonederoJC) abril 30, 2015
No obstante, las dudas a este respecto son totalmente legítimas. Este jueves reconocía por primera vez públicamente sentirse «traicionado», «engañado» y decepcionado con la estretegia política de su formación. Y no ha tardado ni medio día en caer. Este jueves a las 12:50 horas no parecía que fuera a tomar hoy esta decisión.
Con permiso de tertulianos y expertos en ruido, sigo con el Programa, en campaña y haciendo de @ahorapodemos la fuerza de cambio de España.
— Juan Carlos Monedero (@MonederoJC) abril 30, 2015
Sin embargo, casi seis horas después de esta reivindicación, Pablo Iglesias ha aprovechado su participación en un evento para hacer pública la dimisión de su 'numero tres'. El líder de la formación ha intentado restar importancia a las declaraciones que Monedero hizo por la mañana. «No las comparto, pero eso no significa que no sean valiosas. El aguijón crítico de Juan Carlos es importante para nosotros. Necesitamos a Juan Carlos volando y con mucha más libertad para hacer lo que hace mejor, que es poner el dedo en la llaga», ha asegurado el dirigente de Podemos, quien ha asegurado que Mondero «ha tenido que sufrir». «Entrar en política tiene riesgos y Juan Carlos Monedero ha vivido los más difíciles», ha apuntado Iglesias, quien ha llegado a admitir también sentir «nostálgia de cuando hacíamos cosas más pequeñas».
Monedero, parafraseando al último ganador del premio Cervantes, Juan Goytilsolo, que diferenciaba entre dos tipos de escritores, los que se dedicaban a escribir y los que sólo buscaban la fama, ha asegurado en la entrevista concedida este jueves que en la política ocurre igual. «Estamos los que vivimos las necesidades de la comunidad y luego están los que viven la política de manera más práctica, buscan el cargo, optan al sillón y buscan un espacio de representación», ha rematado. «¿Te refieres a Podemos?», ha preguntado sorprendido el entrevistador, Fernando Berlín. Y Monedero ha dicho que sí. Durante esta conversación, ha asegurado sentirse «totalmente» engañado por la «concepción general de la política», y aunque ha reconocido que su partido es «lo más decente que hay», también ha advertido de que «eso no quita» que estando en «contacto permanente» con estas prácticas «a veces» Podemos «no se pueda parecer a los que queremos sustituir».
El doctor en Ciencias Políticas por la Universidad Complutense cree que la «política de partidos es necesaria, pero ingrata» y ha avisado de que la política concreta tiene reglas y compañías que quiere «lejos» de él. Monedero admitía entre líneas la decepción que siente por su propia formación. «Yo vivo en la política desde muy jovencito, pero lo que me cuesta sobrellevar es la partitocracia», ha insistido. El dirigente de Podemos admite que el Estado es parte de la democracia, pero lo califica de «peligroso», puesto que siempre tenderá a escuchar antes al Ibex35 que a los ciudadanos. Igual que la televisión. Cree que en su formación ahora «importa más un minuto de TV que reunirse con un pequeño círculo». Y aunque reconoce que hay que hacerlo, también alerta a los suyos de que «es pan para hoy y hambre para mañana». «Podemos debe de dejar de mirarse en espejos que no son los suyos», ha llegado a advertir.
La solución para este académico pasa porque Podemos vuelva a sus orígenes. «Desde que nace Podemos tiene dos almas. El alma de donde viene -el del 15M- y la propia conversión en partido político que te sitúa en un ámbito institucional con una serie de reglas. Yo creo que hay que mantener una tensión entre ambos polos, porque el riesgo de que seas rehén de esas exigencias es muy alto», advierte Monedero, quien cada vez parece tener más claro que en Podemos se está perdiendo la «esencia». Llegando incluso a sugerir que Podemos ya se acerca a la casta. «Podemos no tiene que aparentar que somos buenos chicos y que no damos problemas al poder, porque es todo lo contrario. Queremos dar muchos problemas al PP y a los que han hecho de España un país subdesarrollado«, ha afirmado, sumándose de nuevo al discurso que el llamado sector crítico lleva meses reivindicando. «La desobediencia es muy importante», ha zanjado, no sin antes reconocer que su deseo es «regresar a la reflexión y dejar de dedicar tanto tiempo a la vida orgánica». Y así será.