Las sospechas de corrupción por parte del presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, han puesto de nuevo al PP valenciano en el disparadero a pocos días de arrancar la campaña electoral. El presidente valenciano y del PPCV, Alberto Fabra, ha exigido a Rus que renuncie a su acta en la Diputación y en el Ayuntamiento de Xàtiva. «Está fuera del PP, debería dejar paso a otras personas para que siguieran con ese trabajo y ese esfuerzo compartido, gente que quiere seguir trabajando con una idea de Comunitat Valenciana distinta y que no se genere ninguna vergüenza», ha aseverado el dirigente 'popular' en Castellón.
Fabra ha presumido de que en el PP no caben comportamientos «bochornosos» y, por ello, ha defendido la decisión de suspender de militancia a Rus, conforme a su criterio «de honradez». «Ese es el nuevo PP y eso es lo que se va a seguir haciendo para demostrar nuestra capacidad no solo de gestión, sino también de honorabilidad y honestidad», ha subrayado el presidente regional, quien también ha confesado que habló con Rus «cuando debía hablar».
Preguntado sobre el presunto «complot» contra él que denuncia Rus y del que ha afirmado hablará tras las elecciones, el presidente regional ha señalado que «eso lo tendrá que decir él, pero antes tendrá que explicar por qué estaba en un coche contando dinero».
Con la suspensión de militancia de Rus, el PP valenciano ha actuado rápidamente para no correr el riesgo de que el asunto empañe la inminente campaña electoral. El primer paso era expulsarlo del partido por sospecha corrupción antes del inicio de campaña y de la visita el próximo martes del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Ahora está por ver si Rus agota la legislatura como alcalde de Xátiva y presidente de la Diputación o si finalmente responde a las peticiones de dimisión. Desde el PP valenciano son conscientes de que tras la retirada del carné de militante no pueden hacer mucho más. «Legalmente no se puede hacer nada. Hemos tomado las medidas que podíamos y creíamos que debíamos tomar. Rus sabe lo que piensa el partido y no podemos hacer nada salvo que renuncie», ha afirmado este domingo la coordinadora general del PPCV, Isabel Bonig.
Rus se aferra a sus cargos
Sin embargo, Rus sigue enrocado y ha vuelto a desafiar al PP. El 'popular' se aferra a sus cargos hasta el final de la legislatura y asegura que no va a dimitir como presidente de la Diputación de Valencia ni como alcalde de Xátiva, porque fue elegido por los ciudadanos. Rus ha defendido su inocencia y ha asegurado haber sido «víctima» de un «burdo montaje» por razones políticas.
Rus se encuentra en el foco de un escándalo de comisiones en el seno de la institución provincial que le apunta de manera directa tras la publicación de algunas de las conversaciones facilitadas por EUPV a la Fiscalía en el marco del 'caso Imelsa'. El presidente de la Diputación insiste en que tiene las cuentas «saneadas» y la gestión de las instituciones que preside «se encuentran igualmente auditadas, controladas y respaldadas por los técnicos y funcionarios que tienen esa misión, independientemente de los responsables políticos».