El Consejo de Garantías de Podemos ha recomendado la apertura de expediente sancionador al secretario general del partido en Cantabria y candidato a la Presidencia de la Comunidad Autónoma, José Ramón Blanco, por insultos y agresiones a integrantes del partido y de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Santander de la que él es miembro.
De acuerdo con la resolución del órgano de control del partido morado en la región aún no se ha tipificado la gravedad de la sanción, pero no se descarta ningún escenario punitivo.
Según la denuncia interpuesta contra Blanco, a la que también ha accedido esta agencia, los hechos ocurrieron el pasado mes de febrero durante una asamblea de la PAH, y a raíz de los mismos una activista de la plataforma y afiliada a Podemos denunció «agresiones verbales y físicas» por parte del líder de la formación en Cantabria hacia otros compañeros.
En la denuncia consta que, después de que los afectados preguntaran de forma «educada y respetuosa» por la «utilización política» de la PAH a Blanco, éste respondió con «una reacción despectiva, llena de falta de respeto hacia todos los asistentes, gestos despectivos, mientras daba la espalda a todos y salía de la sala». Ya en la calle, y una vez acabó la asamblea, otro portavoz de la PAH y de Podemos, Óscar Manteca, se dirigió al integrante que había preguntado por el uso partidista de la plataforma, al que «increpó».
A continuación, Blanco le «profirió insultos, desde eres un hipócrita hasta hijo de puta, mientras «le propinaba varios golpes con las dos manos en el pecho, llevándolo contra la pared». Los denunciantes censuran la «tremenda escena de agresividad y falta de ética por parte de José Ramón».
Resolución y consecuencias
Según el Consejo de Garantías de Podemos Cantabria, estos hechos «podrían contravenir el documento ético y político aprobado en la asamblea ciudadana y contemplado en los estatutos» del partido. Así, podrían ser considerados como «infracciones leves», entre las que se incluyen manifestaciones públicas que «tengan por objeto desacreditar personalmente o menospreciar a un afiliado».
Estas infracciones pueden ser sancionadas, según la resolución, con «suspensión de militancia de entre 15 días y tres meses, inhabilitación para el desempeño de cargos en el seno del pulido o en representación de éste, durante un periodo de entre uno y seis meses, o apercibimiento verbal o escrito».
Pero los hechos, de acuerdo con la resolución, podrían ser calificados también como «infracciones muy graves o graves», que «conllevarán sanciones» que «se impondrán teniendo en cuenta la gravedad de los mismos, su reiteración, la trascendencia interna y externa de Podemos, y, en su caso, la responsabilidad del inscrito, en tanto que es persona con responsabilidades públicas por expresa confianza de la organización».