El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha advertido que no es «necesario» que su «lealtad» a Mariano Rajoy sea «comprobada todos los días». «Mi lealtad es una forma de trabajar desde que me levanto hasta que me acuesto«, ha reivindicado, tras señalarle el socialista José Luis Méndez Romeu como «uno de los Brutos que quiere apuñalar al César Rajoy».
Feijóo ha lanzado este mensaje en la sesión de control del Parlamento de Galicia, en la misma jornada en la que el periódico La Voz de Galicia publica una entrevista con él en la que advierte que el PP necesita en el ámbito estatal «autocrítica» y que ésta «no puede quedarse en palabras», sino que debe conllevar «hechos y decisiones».
Este miércoles, tras afearle Méndez Romeu los resultados del pasado domingo, el líder del PP gallego ha ironizado también con que el PSOE esté «encantado» con los suyos y ha anticipado que, con independencia de lo que pase en su partido en el ámbito estatal, los populares gallegos no se quedarán con los brazos cruzados, sino que «escucharán a la gente».
«Seguiremos escuchando a la gente para seguir ganando las elecciones y, si es posible, con una mayoría más amplia de la que tenemos ahora», ha sentenciado, antes de recordar que, en todo caso, el PPdeG es el partido que «ganó» las elecciones en Galicia y con un porcentaje que supera «en diez puntos» los apoyos que su propio partido recibe en el conjunto del Estado.
Rajoy, «el mejor candidato»
Por su parte, la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, considera que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, será «el mejor» candidato para ocupar ese puesto y, aunque ha mostrado respeto por la decisión de varios 'barones' del partido de dejar sus puestos tras el 24M ha opinado que «es momento de estar todos unidos».
En declaraciones a la Cadena Ser, Sánchez-Camacho ha defendido que «todos los barones» saben que Rajoy será el mejor candidato, incluido el castellanoleonés Juan Vicente Herrera, que este martes aconsejó a Rajoy mirarse «al espejo» antes de decidir si está en condiciones de serlo.
Sánchez-Camacho respeta la decisión de varios de sus compañeros de dejar sus cargos en el partido –así lo harán el valenciano Alberto Fabra, el balear José Ramón Bauzá y, el año que viene, la aragonesa Luis Fernanda Rudi– pero ha opinado que ahora «es momento de actuar con prudencia, serenidad, responsabilidad y de estar todos unidos» para «acabar el trabajo que está a medias».
A su juicio, el PP tiene por delante «mucho trabajo que hacer» para el «reto importante de las elecciones generales» y también para las elecciones catalanas previstas para septiembre.
De hecho, ha esgrimido la convocatoria de autonómicas en Cataluña para dejar claro que ella va «a seguir adelante». Así, aunque ha admitido que el PP catalán tendrá que analizar los «errores» que haya podido cometer en las elecciones locales, donde los resultados «no han sido buenos», cree que «el reto más importante para el PP catalán son las autonómicas de dentro de tres meses, importantísimas para Cataluña y para toda España».
«Los antisistema han entrado ya en el Ayuntamiento de Barcelona y puede ocurrir también en la Generalitat, y puede producirse un proceso de separación y de declaración de independencia dependiendo de los resultados del 27S y sólo un gran partido como es el PP en toda España lo puede frenar», ha avisado.
La presidenta del PP catalán ha relacionado el mal resultado del PP en las lecciones a que su partido no ha tenido «cercanía y proximidad» y «no ha sabido explicar» que las medidas que ha tomado el Gobierno, aunque fueron «muy duras», se hicieron «por el bien de España».