El AMPA del instituto de Secundaria 'Ciudad de Jaén' ha afirmado este jueves que el centro informó del presunto caso de acoso escolar a la menor que se quitó la vida a Inspección Educativa y que, cuando se produjo la tragedia, los responsables de la Dirección de Área ordenaron al centro que no informaran a los compañeros de la fallecida.
Sin embargo, la Consejería de Educación ha asegurado que hay psicólogos en el IES Ciudad de Jaén «desde el viernes por la mañana» y que es «absolutamente falso que se haya prohibido a los profesores hablar, incluso con los medios de comunicación».
El portavoz del AMPA, Germán Suela, ha leído un comunicado a las puertas del centro en relación a la trágica muerte de la menor y la situación de las dependencias educativas. El AMPA sostiene que cuando el centro tuvo conocimiento del caso de acoso escolar, se activó el protocolo de la Comunidad de Madrid para hacer frente a la situación, incluida la relativa a informar a la Inspección Educativa de lo ocurrido.
«Cuando los responsables de la Dirección del Área se personaron, ordenaron que no se comunicara el suceso a los compañeros de la alumna», relata el comunicado, señalando que ello dificultó la labor del profesorado para acompañar al alumnado en esta difícil situación.
A su vez, el AMPA asegura que el apoyo psicológico que hubo fue el ofrecido por ellos mismos, al sostener que la Administración no autorizó la petición de ayuda hasta las 10.30 horas del lunes.
Relata que ante la «magnitud de la tragedia y para poder afrontar la dolorosa y grave situación», el instituto solicitó ese día apoyo psicológico y recursos especializados a la directora de Área Territorial de Madrid capital, Belén Aldea, quien les comunicó que «»no existían esos recursos».
Ante ello, se solicitó por el centro un psicólogo especializado al Colegio Oficial de Psicólogos, recomendando esta entidad «que se les comunicara a los alumnos lo antes posible lo sucedido».
«Cuando los responsables de la Dirección del Área se personaron, ordenaron que no se comunicara el suceso a los compañeros de la alumna fallecida. Esa misma mañana el profesorado se encontró con la imposibilidad de actuar con libertad y profesionalidad necesaria para informar y acompañar al alumnado convenientemente en su duelo», expone el AMPA.
A su vez, asegura que el lunes 25 de mayo se enteraron de que el director había sido apartado de sus funciones por los medios de comunicación cuando ese mismo día la Inspección calificaba de «impecable» la aplicación del protocolo de acoso escolar, así como la actuación de los profesionales.
Por otro lado, el AMPA del centro recuerda que lleva denunciando las carencias del centro desde hace años y que, «lejos de solucionarse, se han ido agravando con el tiempo, llegando a ser insostenibles».
Desde principio de curso, según su relato, la comunidad educativa se ha movilizado ante la «alarmante situación provocada por el deterioro de las instalaciones y la desproporción de alumnos, espacio físico y recursos asignados», lo que ha generado «problemas de masificación, seguridad, higiene y convivencia».
Expone el AMPA que el centro ha pasado de 691 alumnos hace seis años a los cerca de 1.150 en el presente curso, de los cuales más de 60 tienen necesidades especiales. Frente a ello, se cuenta en el instituto con menos de 90 docentes a tiempo completo y un solo educador.
«Queremos dejar claro que en ningún momento nuestras denuncias han estado relacionadas con el acoso escolar, porque hasta ahora no teníamos conocimiento de que se hubiera producido ningún caso. Pero sí contra la masificación, la conflictividad que se vive, la precariedad de las instalaciones y los pocos medios con los que contamos, que ponen en riesgo la seguridad de nuestros hijos», agrega la asociación de padres del centro.
Asegura también que han requerido «a todas las instancias posibles sin obtener la respuesta adecuada» y que Educación se mostró «tajante» ante la petición de otro orientador para el instituto, al manifestar que «independientemente del número de alumnos y la complejidad de estos, lo estipulado era asignar un solo orientador».