El secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Ignacio Ybáñez, firmará este miércoles en Washington el acuerdo con EEUU que hará de Morón de la Frontera (Sevilla) base permanente de la fuerza militar norteamericana de despliegue rápido en Africa.
Estaba previsto que ese acuerdo, que permitirá aumentar hasta un máximo de 3.000 el número de militares estadounidenses desplegados en Morón, se firmase durante la visita del secretario de Estado norteamericano, John Kerry, a Madrid, prevista para el 31 de mayo, pero que canceló a última hora como consecuencia de su caída de bicicleta en Francia.
Como a ambos países les urge firmar este convenio, para que lo ratifiquen las Cortes antes de su disolución, Ybáñez se desplazará a Washington para rubricarlo, lo que significa que hay escasas perspectivas de que Kerry retome a corto plazo su viaje a Madrid.
La última vez que un jefe de la diplomacia de EEUU realizó una visita oficial a España fue hace ya cuatro años, cuando Hillary Clinton se reunió en Madrid con la entonces titular del departamento, Trinidad Jiménez.
El acuerdo con EEUU sobre Morón obliga a modificar el Convenio bilateral de Defensa entre España y EEUU para incrementar y convertir en permanente el despliegue –hasta ahora temporal– de marines que EEUU mantiene en Morón desde 2013 y que venía siendo prorrogado año tras año.
Los cambios negociados entre ambos Gobiernos –que deberán ratificar las Cortes españolas, donde el PP tiene mayoría absoluta– permitirán aumentar hasta 2.200 militares y 500 civiles el número de efectivos que EEUU podrá destacar en Morón con carácter permanente, apoyados por 26 aeronaves.
A estos 2.200 militares se les podría sumar otro contingente temporal de 800 efectivos en caso de crisis, por lo que el máximo autorizado de militares estadounidenses ascendería a 3.000.
Desde el ataque al Consulado de EEUU en Benghazi en 2012, EEUU buscaba un emplazamiento en Africa para esta fuerza de despliegue rápido, que situó con carácter temporal en Morón hasta que encontrase otra alternativa.
Como no la encontró, finalmente solicitó a España permiso para un despliegue permanente de una fuerza que podrá desplegarse de manera rápida en el norte de Africa para proteger a ciudadanos e instalaciones de EEUU, España y de otros miembros de la OTAN, especialmente frente a la amenaza que representa el avance del yihadismo en el Magreb y el Sahel.
Mismo método en Defensa hace una semana
Además del acuerdo que Exteriores lleva hoy a EEUU para su firma, el Ministerio de Defensa ha negociado un segundo documento, que recoge algunas compensaciones económicas e industriales, también suscrito en suelo norteamericano y también por un segundo nivel político.
El secretario general de Política de Defensa, Alejandro Alvargonzález, cerró el pasado 9 de junio también en Washington con su homólogo, James Townsend, el acuerdo técnico que acompañará al protocolo de enmienda al convenio de cooperación en materia de Defensa con los Estados Unidos.
El acuerdo entrará en vigor una vez que el protocolo sea firmado por los departamentos de Exteriores de ambos países y ratificado por el Parlamento español.
En virtud de lo pactado, España integrará un oficial de enlace en el cuartel general del comando africano de Estados Unidos (AFRICOM) y se establece la posibilidad de incorporar oficiales en otros cuarteles generales en un futuro próximo.
Por su parte, Estados Unidos considera establecer un elemento de enlace de operaciones en el Estado Mayor Conjunto español. De la misma manera, se reforzará, el adiestramiento conjunto de militares de ambas naciones y la realización de un mayor número de ejercicios conjuntos.
También se prevé una inversión inicial de 29 millones de dólares para mejoras en la base de Morón, lo que generará los necesarios puestos de trabajo.
Además, «ambos países buscarán oportunidades adicionales para los trabajadores actuales y futuros de la comunidad local, siguiendo el principio de proporcionalidad entre trabajadores estadounidenses y españoles que establece el convenio vigente», informó el Ministerio.
Asimismo, Estados Unidos pretende recomendar la aprobación de transferencias de armas y servicios de forma sistemática para potenciar la interoperabilidad de las Fuerzas Armadas de España con las norteamericanas.