La Fiscalía del Tribunal Supremo ha solicitado el sobreseimiento de la causa por presunto maltrato a su exmujer abierta al ex ministro socialista Juan Fernando López Aguilar. El procedimiento volvió al alto tribunal después de que este órgano pidiera la remisión de más pruebas a la juez de Violencia sobre la Mujer número 2 de Gran Canaria, que fue la que inició las actuaciones.
El representante del Ministerio Público en el Supremo rectifica de este modo su posición en este asunto, ya que el pasado mes de abril informó a favor de apertura de un procedimiento contra el eurodiputado canario del PSOE al entender que de las diligencias remitidas se desprendía «indiciariamente la existencia de delito» y por ello era necesario continuar con la investigación.
El dictamen de la Fiscalía estaba pendiente desde que el pasado 29 de mayo la magistrada canaria elevara por segunda vez una exposición razonada sobre el presunto caso de violencia de género pese al criterio en contra de la Fiscalía de Las Palmas, que no encuentra indicios de delito en la actuación del exmandatario, investigada a raíz de unas actuaciones policiales en la vivienda de la que fuera su esposa.
Según detalla la Fiscalía del Supremo el mandato que se realizó al Juzgado de Violencia era el de determinar si había algún hecho del que existieran indicios de participación del aforado que no fueran ya cosa juzgada, y la nueva exposición razonada de la juez canaria no da cumplimiento a esta petición.
A partir de ahí el Ministerio Público analiza el contenido de la denuncia realizada en enero de este año por el hijo de la exmujer Gorka de la Nuez, quien participó a la Policía sus sospechas sobre las agresiones sufridas por su madre hasta en tres ocasiones, que ella excusó como accidentes domésticos.
Contenido de la denuncia
En uno de los casos, y tras el aviso de una amiga de su madre, el hijo comprobó que ésta tenia un ojo morado si bien manifestó haberse caído. Habló también de vejaciones del exministro a la mujer a la que llamaba «gorda», «no vales para nada» y «has arruinado mi vida».
Un día después el joven retiro la denuncia y más tarde manifestó que no la mantenía aduciendo que se puso nervioso cuando vio a su progenitora con el ojo amoratado.
La propia Natalia de la Nuez explicó el ojo morado como un accidente en el baño en Comisaría y posteriormente en el juzgado, donde incidió en que el eurodiputado nunca la había agredido ni insultado. El juzgado archivó las actuaciones ante las «contundentes manifestaciones» de la mujer.
Tres meses más tarde se presentó en el mismo juzgado el atestado policial instruido con ocasión de unos incendios ocurridos en el domicilio de De la Nuez, que fue el que dio origen a las actuaciones. La mujer volvió a negar el maltrato.
La Fiscalía subraya que no existen episodios nuevos posteriores al archivo inicial de las actuaciones y que, aunque no hay en el auto de esta juez descripción fáctica de los presuntos episodios de maltrato si se dice que la exmujer de López Aguilar afirmó que nunca la habían maltratado. «Ello permitiría estimar (*) que cualquiera de los episodios de maltrato habitual han sido objeto de sobreseimiento libre», concluye.