El Camino de Santiago es un recorrido que muchas personas hacen por ocio, por devoción, por acumular una experiencia más o, como en este caso, para dar a conocer un reciente proyecto de una asociación que se encarga del cáncer en adolescentes y jóvenes. Lo harán además a la carrera, una larga carrera de 680 kilómetros por una gran causa. La Asociación española de Adolescentes y Adultos jóvenes con cáncer (AAA) fue creada en 2011 a partir de la iniciativa de Rocío Nogueroles, de la Fundación IN, jóvenes contra el cáncer; con la colaboración de profesionales que trabajan en el Hospital Infantil Universitario Niño Jesús; y respaldado por algunas ONG, como explican a Estrelladigital.es desde la Asociación.
Cada año se diagnostican unos 1.300 casos de cáncer infantil y de ellos la tercera parte corresponde a adolescentes entre 15 y 19 años, según informan a este diario desde la AAA. El problema es que existen pocos datos sobre la supervivencia del cáncer en este grupo de edad y la dificultad en el registro de los casos. Por ello, la Asociación ha desarrollado una iniciativa para que aumenten los conocimientos sobre la enfermedad en este grupo de edad.
Los grupos de edad de entre 15 y 19 años son los más desconocidos respecto al cáncer
‘Corre la voz’ es el nombre elegido para que la Asociación difunda sus ideas y proyecto a los largo de las ciudades y pueblos entre Madrid y Santiago. Otras asociaciones ya habían hecho el Camino, “pero no por relevos y en quince etapas desde Madrid”, comenta a este diario Alejandro del Valle, coordinador del proyecto.
“El camino de Santiago es una vía muy importante tanto a nivel nacional como internacional y en la cual se mueve mucha gente de todas las edades y nacionalidades con las que poder difundir el mensaje de la AAA”, sentencia del Valle.
El proyecto está formado por gente del ámbito sanitario. Saldrán de Madrid el 26 de septiembre y habrá seis corredores fijos más dos volantes cada semana, a éstos les acompañarán en coche dos personas y un fisioterapeuta. Tanto las etapas como los relevos pueden verse en su web, en la que cada persona puede unirse y ayudar a difundir el proyecto. También se puede hacer una aportación monetaria, una donación, que “irá íntegra para la AAA”, comenta Alejandro.
Casi 680 kilómetros para concienciar de una realidad con la que tienen que vivir algunos jóvenes y adolescentes entre los 15 y los 19 años y que esta Asociación pretende difundir o dar a conocer un poco más, para no encontrarse tan aislados dentro de la sociedad.