La Policía Nacional ha detenido este domingo en Fuerteventura a seis individuos que se hacían pasar por guardias civiles para robar a narcotraficantes durante compraventas de droga en las Islas Canarias. El grupo desarticulado utilizaba placas falsas de la Benemérita para llevar a cabo sus actos delictivos.
Cuatro de los arrestados fueron interceptados por un equipo del Grupo Operativo Especial de Seguridad (GOES) de la Policía Nacional cuando éstos se dirigían con parte del botín a coger el barco de vuelta a la isla de Gran Canaria. Horas más tarde fueron detenidos otros dos integrantes del grupo cuando abandonaban en vehículo el complejo hostelero de la localidad de Costa Calma donde estaban alojados.
Además, se han practicado cinco registros domiciliarios en los que se han incautado tres placas de la Guardia Civil falsas, cinco armas blancas, una pistola eléctrica, bridas, una cinta americana, varios dispositivos de seguimiento GPS y 45.000 euros en efectivo.
Las investigaciones comenzaron el pasado mes de febrero, cuando un ciudadano denunció en una comisaría de Las Palmas de Gran Canaria la sustracción de 3.000 euros en efectivo. Un grupo de individuos armados habrían retenido a la víctima contra su voluntad durante varias horas, aunque finalmente logró escapar de sus captores.
Las primeras pesquisas se centraron en la plena identificación y localización de los componentes de la organización. Los investigadores constataron que la misma estaba formada por seis individuos afincados en la isla de Gran Canaria.
El 'modus operandi' del grupo estaba basado en una clara jerarquía y delimitación de funciones que les llevaba a planificar cuidadosamente sus acciones, según ha explicado el Departamento del Interior. El grupo criminal estaba principalmente dedicado a los 'vuelcos' o robos de dinero o sustancias estupefacientes a traficantes en el momento de ir a efectuar la transacción.
Las vigilancias permitieron comprobar que varios miembros de la organización se trasladaron a la isla de Fuerteventura. Allí mantuvieron citas con desconocidos, alquilaron varios vehículos y recorrieron varias veces el mismo trayecto a altas velocidades, por lo que los investigadores pensaron que podrían estar preparando alguna acción delictiva. Durante una de las vigilancias alrededor de la localidad de Tuineje, los agentes hallaron a un individuo con síntomas de haber sido agredido, totalmente aturdido y desorientado. Éste les aseguró que momentos antes le habían asaltado y golpeado varios encapuchados que decían ser guardias civiles.
Los falsos agentes le habían robado las llaves del vehículo y varios miles de euros en billetes de 10, 20 y 50.