Ciudadanos (C's) ha presentado este lunes el cuarto bloque de propuestas de su programa económico y social, dedicado a la educación, entre las que incluye debatir la supresión de la repetición de curso, acabar con las tasas que aplican algunos colegios públicos y concertados, establecer un MIR docente, y evaluar a los profesores y a los centros periódicamente.
Para las universidades, apuesta por vincular a los resultados (como la tasa de empleo de los graduados) el 20-25% de la financiación de los centros. También propone establecer pruebas públicas para la contratación directa, dar más poder al rector pero haciendo que rinda cuentas de su labor y evaluaciones externas de la calidad de la investigación.
En la educación no universitaria, C's plantea un Pacto Nacional por la Educación que «mire a una generación, no a una legislatura o a un gobierno», para lograr «un sistema educativo de calidad que además sea más equitativo». Para el partido de Albert Rivera, es urgente poner remedio a los resultados «insuficientes» del sistema educativo español porque suponen un coste para las arcas del Estado y limitan el crecimiento económico del país.
Respecto al ámbito universitario, considera que «hay mucho que se puede hacer sin gastar un euro adicional». Según C's, no se puede dar más financiación y más autonomía si al mismo tiempo continúa la «mala contratación», se crean facultades y títulos «como quien colecciona cromos» y se mantienen organismos «inútiles».
Estas son algunas de las propuestas para la educación no universitaria:
Igualdad de oportunidades
– No ofrecer una educación preescolar (de cero a tres años «gratuita para todos», pero sí garantizar el acceso de los hijos de las familias más desfavorecidas dándoles una «prioridad absoluta» en las reglas de acceso a las plazas públicas, a tarifas accesibles o incluso gratuitamente.
– Modelo tutorial personalizado para alumnos con carencias en hábitos elementales básicos.
– Intentar minimizar las repeticiones de curso, e incluso debatir su supresión, mientras no se hayan desarrollado los instrumentos de apoyo para que no se produzcan.
– Currículos más flexibles para adaptarlos a las distintas necesidades y capacidades de los alumnos.
– Establecer itinerarios de calidad y pasarelas para que siempre existan vías para permanecer escolarizado y elaborar un Plan Nacional de FP Dual.
– Acabar con las tasas, tarifas o gastos que aplican algunos colegios públicos y concertados.
– Promover un sistema para compartir libros de texto.
Reconocimiento, formación y evaluación de los docentes
– Profesores de apoyo para atender a la diversidad de los alumnos.
– Establecer un MIR docente (con una residencia remunerada) y crear la posibilidad de cesar a un profesor en su puesto si es «extremadamente ineficaz» o crea «alarma social».
– Realizar un estatuto docente donde se vincule su formación y su labor en el centro educativo con su promoción profesional o reconocimiento económico.
– Hacer del conocimiento del inglés un requisito indispensable para ejercer la función docente.
– Garantizar la formación, autonomía y promoción (profesional y económica) de los equipos directivos.
– Evaluar a los docentes periódicamente y premiar con promociones a los que lo hagan mejor. Crear un cuerpo de subinspectores que asuma la labor burocrática de elaboración de informes, y que el cuerpo de inspectores se dedique a la evaluación y el control de calidad de la enseñanza.
Autonomía de los centros, flexibilidad interna y rendición de cuentas
– Dejar un margen de decisión a los centros educativos en las asignaturas que no son básicas. Rebajar la labor burocrática de los directores para que se centren en la mejora del proceso de enseñanza.
– Realizar pruebas estandarizadas sobre distintas competencias cognitivas para comparar el desempeño de los centros y permitir también a los padres evaluar los logros en competencias no cognitivas.
– Educar a los niños en dos idiomas (español o inglés) o tres (añadiendo una lengua autonómica). Que los centros de eduación primaria y secundaria de las comunidades monolingües ofrezcan, en función de la demanda, una segunda lengua española como asignatura optativa.
Mejorar las competencias cognitivas y no cognitivas para mejorar la competitividad y la empleabilidad
– Fomentar la creatividad y la capacidad de análisis.
– Extender los programas de intercambio europeo de profesores y alumnos de secundaria para mejorar una lengua extranjera.
– Mejorar el uso de las tecnologías de la información y la comunicación en primaria y secundaria.
– Potenciar la educación artística y cultural e identificar el talento.
– Enseñar a hablar y expresarse en público.
– Fomentar con el deporte la cooeperación y la competencia sana.
– Participación de los alumnos en proyectos y actividades prácticas para adquirir experiencia real en espíritu empresarial.
Valores cívicos y pensamiento crítico
– Hacer obligatorio el estudio de los derechos y deberes constitucionales y fomentar el desarrollo de los mejores valores cívicos y democráticos.
– Desde la premisa básica de la laicidad, impartir una asignatura sobre la historia de las religiones.
Aprendizaje social y emocional
– Dotar a los niños y jóvenes de destrezas y habilidades sociales y emocionales básicas.
– Plan de lucha contra el acoso escolar, el ciberacoso y el bullying.
Asimismo, el documento plantea hacer una evaluación científica, rigurosa e independiente del funcionamiento del sistema educativo y extender la educación y la formación en edades adultas, con bonos o cuentas de formación a disposición directa de los usuarios.
Estas son algunas de las propuestas para la educación no universitaria:
– Mayor especialización de las universidades.
– Las comunidades autónomas deben tener la capacidad de, en situaciones extraordinarias (incumplimiento de objetivos), propiciar fusiones o cerrar centros disfuncionales.
– Selección del personal docente e investigador por dos vías: acreditaciones públicas (para ser funcionario) o contratación directa y permanente por las universidades tras pruebas públicas. Suprimir la gestión como mérito.
– Incentivos económicos para el personal docente e investigador y al personal administrativo y de servicios.
– Dar más poder al rector y que este a su vez responda ante la sociedad por su gestión.
– Mejorar la financiación a la educación superior (mantener el objetivo del 3% del PIB). Acompañar cualquier incremento de tasas de un incremento de becas, no permitir que las universidades se puedan endeudar y hacer que entre el 20 y el 25% de la financiación dependa de los resultados (en investigación y docentes, en función de la tasa de empleo de los graduados).
– «Generoso sistema» de becas de excelencia. Revisar y racionalizar la política de becas, centrándose en las becas-salario.
– Supresión inmediata de la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (ANECA) como agencia de acreditación para las universidades públicas, manteniéndola solo para la validación de títulos.
– Fomentar la internacionalización a través de políticas públicas e introduciendo un nivel de tasas y matrículas diferencial y elevado para estudiantes de fuera de la UE.
– Evaluación absolutamente externa de la calidad de la investigación de las universidades según su posición en los tres mejores rankings internacionales, su clasificación según los sexenios de investigación, su clasificación pro proyectos de investigación y su capacidad de atraer estudiantes.
– Sustituir el Consejo Social y el Consejo de Gobierno por el Consejo de la Universidad, con mayoría absoluta de académicos. No podrán ser miembros quienes tengan o hayan tenido un cargo político, empresarial o sindical en los cuatro años anteriores.