El consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández, ha señalado que, para conseguir una sanidad universal que incluya a los inmigrantes en situación irregular, es necesario derogar la reforma sanitaria que introdujo en 2012 el Gobierno a través del Real Decreto 16/2012, de 20 de abril, de medidas urgentes para garantizar la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud (SNS) y mejorar la calidad y seguridad de sus prestaciones.
Fernández ha afirmado a la entrada del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) que, aunque desde su consejería se propuso incluir la universalidad de la sanidad en los puntos del día, su petición ha sido ignorada, y aboga por la «derogación del Real Decreto, que lo que hace es eliminar el no aseguramiento que la Ley General de Sanidad de 1986 ya predecía, y lo que ha hecho es generar que las personas solamente puedan tener asistencia sanitaria si están dadas de alta en la Seguridad Social«, ha asegurado.
Tras este primer paso, el siguiente sería «evaluar y normativizar cómo tiene que ser la devolución de la tarjeta sanitaria». Fernández ha afirmado que uno de sus objetivos es que «la universalización sea una realidad y que la salud sea un derecho de todos los ciudadanos que vivan en este país».
Fernández ha señalado que la modificación del calendario vacunal para incluir la vacuna de la varicela ha sido una «propuesta directamente unilateral de parte del ministro» y cree que se debe debatir en este Consejo para conocer la opinión de todos los consejeros autonómicos.
«Es muy importante que toda evaluación, mejora y revisión del calendario vacunal se haga como se venía haciendo hasta aquí, que es haciéndolo en consenso, tratándolo en el Consejo Interterritorial y no de manera unilateral como ha ocurrido», ha afirmado el consejero castellano-manchego.
Junto a la universalización de la sanidad, el consejero de Castilla-La Mancha ha afirmado que también pidió en una carta incluir en el orden del día del CISNS el tratamiento de la hepatitis, otra propuesta que ha sido ignorada, aunque se volverá a proponer tras tratar los asuntos programados.
Fernández ha asegurado que las dos propuestas que se enviaron para el orden del día «referidas a la derogación del Real Decreto y a la transparencia del tratamiento de la hepatitis deberían estar en el orden del día. No lo han conseguido, y se intentará que se traten en el orden del día del consejo de hoy a partir de los puntos que ya se traen programados».
A pesar de que estos temas han quedado fuera de la reunión, Fernández ha afirmado que llega «ilusionado» por el cambio político del consejo, en el que actualmente hay nueve consejeros socialistas respecto a los dos presentes en el consejo anterior. Además, ha asegurado que pretenden tener la participación que cree que tiene y «que merece la opinión pública», y que a partir de ahora «tiene que ser escuchada la voz del otro signo político».