Este fin de semana en España será distinto. El protagonismo de las tormentas provocará un descenso de las temperaturas y acabará con la ola de calor que ha permanecido en nuestro país durante todo el mes de julio, sin descanso. Las mínimas previstas para estos días rondarán los 18 grados muy lejos de los 25 o 26 que hemos tenido estos días atrás. Las noches por tanto, serán mucho más placenteras, podremos conciliar el sueño e incluso disfrutar del frescor de las últimas horas del día paseando.
El tercio norte y este peninsular registrará tormentas fuertes, que podrían ir acompañadas de viento y granizo, desde esta noche y durante la jornada del sábado y domingo, según la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Estos fenómenos los originará un frente de aire frío sobre el norte de la Península que provocará un aumento de la inestabilidad que irá en aumento desde esta madrugada.
De hecho, según este organismo, en las últimas horas ya se están registrando chubascos y tormentas localmente fuertes en el Levante, Sureste y también en Pirineos y se prevé que continúen en estas zonas durante el día de hoy, especialmente en Castellón.
Para este viernes y sábado, el organismo ha indicado que las previsiones apuntan a que se producirán «chubascos y tormentas localmente fuertes» en buena parte del tercio norte peninsular y la mitad este del país, que podrían ir acompañadas de «rachas muy fuertes» de viento, y de granizo.
Concretamente, se espera que las tormentas más intensas se produzcan en La Rioja, Navarra, Aragón y las áreas colindantes. En estas zonas los chubascos pueden ser localmente muy fuertes e ir acompañados de granizo grande. En cuanto al sábado, la borrasca afectará únicamente a la costa peninsular Mediterránea y, posiblemente, también a las Islas Baleares, aunque el organismo ha precisado que la tendencia durante el día será a que disminuyan las precipitaciones.
El lunes, tras este respiro inusual, volverá el verano. Agosto comenzará como lo hiciera el mes de julio, sin ningún tipo de aviso por riesgo de altas temperaturas. Aunque se prevé que éstas alcancen los 39 grados en el sur de la Península. Así que duerman este fin de semana, su cuerpo, gracias a estas temperaturas más suavizadas, lo agradecerá.