Agua, sequía, Comunidad Valenciana, Murcia, Castilla-La Mancha, Comunidad de Madrid y Extremadura: un cóctel explosivo que ha vuelto a estallar años después. La decisión de Emiliano García-Page de blindar la región de trasvases ha hecho saltar las alarmas. El gobierno manchego pidió la semana pasada el cese “inmediato” del trasvase Tajo-Segura al encontrarse los embalses de cabecera del río por debajo de los 400 hectómetros cúbicos, el umbral mínimo legal para poder trasvasar agua a la zona de Levante. Los ecologistas, por su parte, apoyan la decisión del ejecutivo regional. Santiago Martín Barajas, responsable del Área de Agua de Ecologistas en Acción ha asegurado a este diario que la situación es “crítica”. “No se debe permitir ese trasvase bajo ningún concepto. Autorizarlo sería, a nuestro entender, una auténtica aberración”, recalca.
Desde Ecologistas en Acción (EA) sostienen que la capacidad de los embalses es menor de la que calcula la propia administración. “No hay agua. Está a capacidad de 14% y ese 14% es teórico. En realidad es mucho menos porque cuando se calcula el agua de un pantano se calcula la capacidad que tiene el pantano y el problema es que se construyeron en los años cincuenta y desde esa fecha hasta ahora ha habido bastante erosión. Es decir, esa tierra va a parar al fondo del embalse y aunque eso no es agua sí cuenta como volumen”, asegura Martín Barajas. De hecho, la asociación afirma que en el hipotético caso de que se produzca ese trasvase, es probable que lo que se traslade desde Castilla-La Mancha hasta la zona de Levante no sea agua. “Hay menos agua de la que contabiliza y un embalse con la capacidad al 14% está al borde de lo que se conoce como ‘embalse muerto’. Ahora mismo no se puede trasladar nada de agua. Es más, seguramente lo que se trasvasaría sería posiblemente cieno, es decir, barro”, añade Martín Barajas. Para EA, la consecuencia más grave si se pone en marcha el trasvase es que “acabe muerto el río Tajo” y cree que la única solución es “no trasvasar”.
“La Comunidad Valenciana tiene sed”
Sin embargo, desde la Comunidad Valenciana critican duramente el anuncio de Page. Este lunes, el delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues ha querido dejar claro que la región “tiene sed” y que los regantes y agricultores valencianos “necesitan esa agua” puesto que “no es patrimonio de nadie” puesto que es “de todos”.
Por otro lado, Moragues ha recordado que existe un memorándum de entendimiento firmado por cinco comunidades autónomas y el propio Gobierno que está “acordado y firmado”. “Hay una ley de evaluación ambiental que está aplicándose y se ha publicado la orden de trasvase entre el río Tajo y el Segura de 20 hectómetros cúbicos”, explica. También le ha exigido al presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, que “pida explicaciones su colega y se haga efectivo ese trasvase”.
Desde el PSOE Castilla-La Mancha han confirmado que se reunirán “pronto” con los socialistas de la Comunidad Valenciana y Murcia para “intentar buscar puntos de entendimiento”. Aunque la portavoz en la comunidad, Cristina Maestre, no ha aclarado cuándo será este encuentro ni a qué nivel, pero sí ha asegurado que “el Gobierno de Castilla-La Mancha va a emprender las acciones necesarias para materializar en persona sus reivindicaciones”.
Los socialistas manchegos creen que se ha reanudado el debate y ha vuelto a estallar la polémica porque el acuerdo sellado en el año 2013 se llevó a cabo bajo gobiernos del PP. El BOE publicó entonces la Ley de evaluación ambiental, un acuerdo entre las cinco comunidades autónomas implicadas –Castilla-La Mancha, Extremadura, Murcia, Comunidad Valenciana y Comunidad de Madrid- que dio rango de ley al trasvase del Tajo al Segura y que culmina la planificación hidrológica del Tajo, Júcar y Segura. Pero el PSOE cree que fue un error. “Antes no había debate, los gobiernos de España y Castilla-La Mancha eran del PP y juntos resolvían la situación de manera calamitosa. Ahora la realidad es otra y el PP toma decisiones en contraste con las del Gobierno de la región, que pide que esta tenga peso a la hora de decidir la situación de los embalses”, ha comentado Maestre. Aun así, tanto los socialistas manchegos como los valencianos se han mostrado dispuestos a dialogar para acabar con la polémica.