El vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado, ha anunciado este lunes que su formación no incluirá una reforma de la Constitución en el programa electoral con el que se presente a las próximas elecciones generales y por tanto renuncia a llevar la iniciativa en este asunto, aunque está dispuesto a «hablar de cualquier cosa que se proponga» desde otras formaciones.
En rueda de prensa, Casado ha dejado claro que la reforma de la Constitución no es la «prioridad» del PP y por ello no la planteará durante la próxima legislatura. «El PP no va a incluir la reforma constitucional en su programa electoral, no es algo que interese a los españoles», ha anunciado.
A su juicio, en España se pueden adoptar decisiones de actualización de las instituciones y regeneración política que no impliquen una reforma agravada de la Carta Magna, como por ejemplo mejorar los reglamentos de Congreso y Senado, abordar la financiación autonómica y local o modificar la ley electoral municipal para que «no gobierne una suma de perdedores».
En este punto, el portavoz de la dirección 'popular' ha defendido que esto no implica que el PP sea un partido «inmovilista», sino que no considera que la reforma constitucional sea una prioridad de los ciudadanos. «Podemos opinar y plantear esa reforma, pero no lo haremos nosotros», ha insistido.