El presidente de PP de Guipúzcoa y portavoz parlamentario de los populares vascos, Borja Sémper, ha afirmado que, «afortunadamente, ETA está acabada, está muerta y hace falta ponerle la lápida y una esquela«.
En una entrevista concedida a Radio Euskadi, Sémper ha señalado que, para eso, hay que ser «inteligentes, hábiles y osados a la hora de llamar a las cosas por su nombre». «Y a esta empresa estamos llamados todos, el PP, el PSE-EE y el PNV, entre otros. Es decir, que aquellos que hemos tenido bien claro que ETA nunca debió haber existido, obliguemos a aquellos que siempre defendieron la existencia de ETA a que digan que se equivocaron con lo que hicieron», ha indicado.
A su juicio, si no, no podrá construirse «un futuro en Euskadi mejor de lo que ha sido el pasado y, si no, podrá parecer, para algunos, que la utilización de la violencia en determinadas circunstancias tiene sentido porque eso es lo que han defendido desde la izquierda abertzale y hoy todavía no se han retractado».
«Y yo veo una Euskadi a futuro magnífica y mucho mejor también en materia de convivencia, pero correríamos muchísimo más y llegaríamos mucho antes a una Euskadi libre de esas amenazas de vuelta o de la utilización de la violencia en determinadas circunstancias, si quienes la han alentado, dicen que se equivocaron profundamente y que piden perdón a la sociedad vasca«, ha subrayado.
El representante popular rechazado que al Gobierno del PP le haya faltado iniciativa en esta cuestión y ha manifestado que esta legislatura «ha sido en la que se han volcado todos los esfuerzos en la salida de la crisis económica, en la recuperación económica y en la creación de empleo».
«Ésa ha sido la prioridad. En el momento en que ETA no asesina y no causa dolor, deja de ser un problema de actualidad. Esto es algo obvio, el problema que teníamos era un paro desorbitado y una situación económica que afectaba a millones de españoles», ha concluido.