Agentes de la Guardia Civil han detenido a un joven de 26 años y a su pareja, una mujer de 34, por sacrificar aves en rituales de purificación degollando al animal para esparcir su sangre en las inmediaciones de cementerios o en descampados de distintas localidades valencianas, según han informado fuentes del Instituto Armado en un comunicado.
La investigación se inició el pasado mes de mayo cuando se encontraron las primeras aves muertas, degolladas y esparcida su sangre creando diferentes formas geométricas y con las vísceras fuera del cuerpo.
Todo esto hacía indicar que se estaba realizando algún tipo de ritual con las aves, ya que en los lugares se encontró también otros objetos utilizados para la realización de posibles rituales de purificación, tales como puros o botellas de ron.
Así, se detectaron cuatro localidades donde se habían realizado estas prácticas, en alguna de ellas en más de una ocasión, con el sacrificio de más de 20 aves. Para el esclarecimiento de los hechos se contó con la colaboración ciudadana, ya que en alguna ocasión fueron sorprendidos tras realizar el ritual, lo que fue fundamental para la localización de los autores, según las mismas fuentes.
Los detenidos, de nacionalidad española, han sido imputados como presuntos autores de un delito de maltrato animal, al sacrificar las aves de forma «consciente y deliberada a través de medios y métodos que han aumentado injustificadamente el sufrimiento de los animales como se objetiva con el hallazgo de las partes de las aves mutiladas y repartidas por el lugar de cada ritual, así como el desangrado de las mismas».
Esta actuación se enmarca supuestamente en la realización de actos de sacrificio en rituales de invocación de espíritus, sanación, purificación u otros inespecíficos religiosos, según las mismas fuentes.