En la mañana del 5 de septiembre el buque ‘Galicia’ recibió una llamada de auxilio para socorrer a un contramaestre del pesquero español ‘JAI-ALAI’. Uno de los hombres, de origen senegalés, había sufrido un aplastamiento de una mano mientras manejaba unas redes. El trabajador tenía una hemorragia abundante que no eran capaces de detener.
El ‘Galicia’ estaba a 350 millas del ‘Jai Alai’, por lo que se aproximó a rescatar al contramaestre. Quien se encontraba en una situación grave y a última hora de la tarde el pesquero español recibió noticias de evacuación del trabajador. Hasta la mañana del día 6 no fue posible este traslado, puesto que los buques tenían que encontrarse a distancia de salto del helicóptero del ‘Galicia’.
Los médicos tenían riesgo de que el senegalés perdiese su dedo pulgar, por lo que la operación se prolongó durante dos horas. Finalmente no hizo falta la amputación y podrá recuperar la total movilidad de su extremidad.