El presidente de la Generalitat, Artur Mas, y su coalición Junts pel sí no lograrán pasar de los 62 a los 63 diputados con el recuento del voto exterior.
Fuentes de la Generalitat consultadas por Europa Press han explicado que, una vez hecho el escrutinio del voto exterior, las cosas seguirán igual y el PP se queda con el diputado de la circunscripción de Barcelona que se disputaba con la lista soberanista.
Quedarse con 62 diputados complica las cosas a Mas, ya que no le vale la abstención de la CUP para su investidura, mientras que con 63 diputados sí le hubiera servido.
Así, el Parlament se constituirá con 62 diputados de Junts pel sí, 63 de la oposición no independentista y 10 de la CUP, lo que significa que Mas no podrá tener mayorías simples sin el concurso del partido de Antonio Baños.
Con 63 diputados, Junts pel sí hubiera podido sacar adelante su proyectos solo con la abstención de la CUP y al margen de lo que hiciera el resto de la oposición, y ahora se le ha complicado el escenario.
Reto difícil
Ya se intuía muy difícil que la coalición soberanista lograra este escaño, ya que necesitaba, según cálculos de la propia candidatura, 15.000 sufragios más en esta circunscripción y las peticiones para votar desde el exterior en la provincia de Barcelona eran de 16.402.
Finalmente, de estas más de 16.000 peticiones se han emitido algo más de 11.000 votos, lo que ya imposibilitaba el escaño para Junts pel sí, y de estos 11.000, la candidatura se ha quedado con casi 6.000 papeletas.