El Rey Felipe VI ha recibido este martes de manos del presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, las credenciales que lo ratifican como primer embajador de honor vitalicio del Camino de Santiago, una «vía universal» cuyos «más genuinos valores», entre los que ha destacado su capacidad de «unir» y de «sumar», seguirá «impulsando» la Corona.
En un acto institucional en el compostelano Pazo de Raxoi, que arrancó pasadas las 11,15 horas, Felipe VI ha proclamado que el Camino de Santiago es «el Camino de Galicia, de España y de Europa». «Contad siempre con la Corona para seguir impulsando sus más genuinos valores», prometió, agradecido por la distinción.
De hecho, ha trasladado que al respaldar el Camino y sus valores en todas las ocasiones que están «a su alcance», solo cumple con su obligación «como Rey y como español». Una acción que acomete «con devoción y con el orgullo de quien sabe que este patrimonio que España ofrece al mundo».
«Esta vía de solidaridad y de paz es apreciada por ciudadanos de todas las naciones como el Patrimonio de la Humanidad que es, con toda justicia», sentenció, con la convicción de que el Camino es «muchas cosas: historia, cultura, arte y geografía». Pero, sobre todo, «son valores» y «una clara manifestación de fe cristiana para el creyente».
«El Camino une, no separa. En todas sus vías, une a Galicia con otras tierras de España, y a España con el resto de Europa y viceversa. El Camino suma y no resta. Suma la voluntad de compartir, de ser solidarios, de entendernos entre personas de todo nuestro país, de toda Europa y del resto del mundo», manifestó Su Majestad.
Vocación ''universal'' de España
Para él, esta «vía universal» también es un «anhelo transitado y perseguido» por miles de personas que, «a través de un viaje singular por algunas de las tierras más bellas de España», realizan también, «muy a menudo», un viaje hacia el interior «espiritual», hacia el conocimiento de uno mismo.
No en vano, el Camino culmina en lo que el Rey ha definido como esta «tierra luminosa» del occidente peninsular y europeo, que, «con tanto simbolismo», sugiere también, como «auténtica metáfora» de la vocación «universal» de España, «otros muchos caminos hacia el resto del mundo».
Reivindicación de la unidad
Antes del discurso de Su Majestad, que pronunció tras recoger su distinción de manos de Feijóo, el presidente gallego le ha recordado la responsabilidad que asume al recibir el nombramiento. De hecho, Feijóo señaló que éste es el «segundo mayor compromiso» del Rey, que ejercerá de «defensor» del Camino «para siempre».
Feijóo también ha aprovechado el acto para realizar un alegato en favor de la «nueva España» que ve representada en «el nuevo Rey» Felipe VI. Esta distinción de embajador creada por el Gobierno de Feijóo fue concedida a Felipe VI cuando todavía era Príncipe de Asturias.
Entre metáforas sobre la España «peregrina» y el Camino como «origen y esencia» de la España de hoy, el presidente gallego ha reivindicado la «singularidad» de Galicia y su pertenencia a una nación «libre y unida», una España «constitucional» que permite «ser» a los gallegos lo que desean «ser» y «salvaguarda de privilegios egoístas».
Y es que, ha remarcado, el Camino «enseñó a Galicia a ser como es». «Nos enseñó que la idea de pertenencia forma círculos concéntricos que solo son hostiles en mentalidades pequeñas», reivindicó Feijóo.
Palabras en gallego
Lo hizo en un acto en el que las primeras palabras del Rey Felipe VI, al asumir «con verdadera emoción y profundo respeto» la distinción, fueron pronunciadas en gallego. También en gallego ha reconocido que entiende que el título «conlleva una responsabilidad».
«Siento que Galicia me agasaja con este gesto que, además, pone de relieve los vínculos milenarios de la Corona con el Camino y con esta preciada tierra gallega», subrayó Su Majestad, quien al recordar el impulso a la ruta durante el reinado del Rey Alfonso II, también destacó el apoyo de las órdenes militares.
En concreto, citó a la Orden de Santiago, al frente de la que estuvo el infante Carlos de Borbón dos Sicilias, primo del Rey Juan Carlos I y fallecido este lunes. Para él tuvo «un recuerdo emocionado lleno de afecto y gratitud».
Primer galardonado
El plan integral de turismo de Galicia liga la figura de embajador de honor del Camino con el reto de posicionarlo como referente a nivel internacional. El título de embajador de honor se reserva para las personas que han sido «claves para exportar la cultura y valores» de la Ruta Jacobea, por su «compromiso, conocimiento y divulgación».
Además de Felipe VI, le ha sido concedida posteriormente la distinción a Vicente del Bosque y al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, aunque ambos tienen pendiente recoger sus credenciales.
Felipe VI lo hizo este martes en un acto que contó con la asistencia, entre otros, de todos los conselleiros excepto el titular de Facenda, Valeriano Martínez; la presidenta del Parlamento, Pilar Rojo; el delegado del Gobierno, Santiago Villanueva; el alcalde de Santiago, Martiño Noriega; la ministra de Fomento, Ana Pastor; así como autoridades eclesiásticas.