El pasado 2 de septiembre, en plena crisis europea por los refugiados, Podemos fue de las primeras formaciones políticas en poner el grito en el cielo cuando se decidió que los jefes de Estado y de Gobierno no se reunirían hasta veinte días despúes para adoptar soluciones a este respecto. Los de Pablo Iglesias, ya entonces, anunciaron una «batería de medidas urgentes para abordar la crisis humanitaria» que se estaba viviendo en las fronteras. Y comunicaron que presentarían estas iniciativas en el Parlamento comunitario y en los Parlamentos autonómicos de España en los que tienen representación.
Iglesias intentó liderar este debate desde el principio. Pero un «malentendido» este martes -o así al menos lo ha intentado justificar la formación-, ha impedido al líder de Podemos intervenir a primera hora en el esperado debate sobre inmigración tras una de la crisis migratorias más importantes que ha vivido la Unión Europea. La situación vivida no ha podido ser más embarazosa para el eurodiputado. El presidente de la Eurocámara, Martin Schulz, ha intentado dar la palabra a Iglesias como portavoz del Grupo de la Izquierda GUE, pero no le ha encontrado.
Hasta en tres ocasiones ha preguntado el alemán por el líder de Podemos. Cuando Schulz ha desistido, el eurodiputado del PSOE, José Blanco, ha aprovechado para pedir la palabra y arremeter contra el líder de Podemos. El exministro español ha calificado de «inadmisible» la ausencia de Iglesias y ha recordado que la «obligación» de un parlamentario «es estar en su escaño». El equipo de Iglesias «cree» que hubo un «cambio en el orden del día», y que eso es lo que ha impedido estar a Iglesias al inicio del debate en la Eurocámara.
Ha tenido que esperar una hora, pero al final Pablo Iglesias ha podido intervenir en la Eurocámara. «Me revuelven las tripas algunas de las cosas que escucho aquí. Me van a perdonar, pero aquellos que definen como plaga a aquellos que huyen de la miseria sólo pueden ser calificados de basura», ha advertido el de Podemos, quien ha intentado afear a la política europea que «lleva 15 años avivando conflictos que ahora se extienden por Europa». «Hemos gastado más dinero en levantar muros que en atender inmigrantes, y los refugiados ni siquiera pueden pedir asilo en los países de tránsito. Frente a la basura, hace falta menos hipocresía», ha zanjado Iglesias.
Entre los asistentes al debate se encontraban algunos de los máximos representantes de las instituciones europeas: el presidente de la Comisión Jean-Claude Juncker y su vicepresidente Frans Timmermans; y el presidente del Consejo Donald Tusk.