La presidenta del PP vasco, Arantza Quiroga, ha negado que haya llegado a un acuerdo con EH Bildu para que haga un rechazo genérico del terrorismo. En declaraciones a Onda Cero, Quiroga ha asegurado que «la condena y la deslegitimación del terrorismo son conceptos que significan y dicen exactamente lo mismo». «Y el PP hace años que en todos nuestros textos hemos hablado de deslegitimación del terrorismo porque es la gran asignatura pendiente que tenemos en Euskadi», ha añadido.
En este sentido, ha precisado que ETA «ha dejado de matar, gracias a la firmeza de la sociedad vasca, la española y el Estado de Derecho, pero ahora queda un recorrido muy importante que hacer». «Somos una sociedad que tenemos heridas abiertas y hemos estado 40 años sometidos a un cáncer que ha dejado muchas heridas en la sociedad», ha apuntado.
A su juicio, los populares «tienen una legitimidad merecida a costa de mucho sufrimiento, de dejar por el camino a 28 compañeros asesinados por la banda terrorista», y creen que, en esta nueva etapa de la sociedad vasca, el PP «tiene mucho que decir, sobre todo, para que se cuente la verdad de lo que ha sucedido».
Por ello, ha abogado porque, entre todos, se haga «una revisión honesta de lo que ha sido la historia de ETA». «Por eso hemos hecho esta iniciativa en el Parlamento vasco con luz y taquígrafos, con un texto que no es novedoso, porque ya se ha votado en otras ocasiones en el Parlamento vasco. El PP esto ya lo ha votado y los únicos que no lo han votado ha sido Bildu y compañía. ¿Por qué?, porque sigue condicionada por ETA y lo que no puede ser es que toda la sociedad sigamos condicionados por ETA ahora que ha dejado de matar y está en una debilidad extrema», ha dicho.
Arantza Quiroga ha asegurado que «ése es el sentido de esta iniciativa y cada uno tendrá que posicionarse». «Pero lo que es importante es que, después de todo lo hemos hecho, de toda la trayectoria del PP vasco, lo que no podemos permitir –yo, desde luego, no creo que así estuviera honrando la memoria de todos sus compañeros asesinados– es dejar que la historia se escriba por aquellos que han estado mirando para otro lado o aquellos que han estado jaleando el terrorismo», ha indicado.
Quiroga ha destacado que su partido «no está aquí para blanquear el pasado de Batasuna, sino para construir una sociedad en paz y en libertad, porque lo que hace falta en Euskadi es trabajar en libertad».
En este sentido, ha negado que haya cambiado el criterio del PP y sigue realizando las mismas exigencias a la izquierda abertzale. «Ésa es la trampa en la que nos están metiendo Bildu y el PNV durante estos tres años», ha indicado.
Como ejemplo, ha puesto el testimonio de víctimas en las aulas, y ha recordado que, mientras los damnificados del terrorismo, como la hija de un Guardia Civil, explican en los colegios cuál es su testimonio, «seguido va la hija de un señor que en la época del final del franquismo fallece en un abuso de la Policía Nacional, que ni siquiera ha sido juzgado».
Respuesta del Gobierno
El ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y presidente del PP de Álava, Alfonso Alonso, ha recordado este miércoles al PP vasco que la posición del partido en el ámbito nacional «es que no se puede renunciar» a exigir a Bildu «la condena expresa del terrorismo de ETA».
En una entrevista en la Cadena Cope, Alonso se ha expresado así preguntado por la moción del PP vasco para la creación de una Ponencia de Libertad y Convivencia que habla de «rechazo expreso a la violencia» para sumar a todas las fuerzas políticas.
Alonso ha recalcado que Bildu «sigue siendo el defensor de ETA» y que este mismo martes se refería a la detención de dirigentes de la banda como «caza del vasco». «Podemos inducir a confusión si nuestra posición no es la de siempre, la posición por la que hemos pagado un tributo de sangre», ha dicho.
Según informa el diario El Mundo, el PP vasco estaría dando pasos a espaldas de Génova con la intención de llegar a posturas comunes con la coalición abertzale para mejorar la convivencia política del País Vasco. La iniciativa choca con el ideario político mantenido hasta ahora por el PP vasco y la dirección de Génova, consistentes en la exigencia al resto de formaciones de una condena expresa del terrorismo etarra.