El día 12 de octubre, lunes, amaneció en Madrid un día desapacible, como para quedarse en casa, a refugio. Ese día, Fiesta Nacional, uno de los grandes ausentes a los actos oficiales –pese a estar invitado– fue el líder de Podemos, Pablo Iglesias. El eurodiputado respondió a la invitación de Zarzuela con un comunicado contundente: dijo que su tiempo “es más útil en la defensa de los derechos y la justicia social en este país, como hacemos a diario junto con otras personas, organizaciones e instituciones, que en este tipo de actos”. Pues bien, entonces, ¿qué hizo Pablo Iglesias este lunes 12 de octubre? Estrella Digital ha podido confirmar que lo que no hizo fue acudir al Parlamento Europeo a la reunión que tenia fijada en la Comisión de Asuntos Exteriores. Podemos confirma que su líder estuvo en Madrid, aunque tenía trabajo de eurodiputado en Bruselas.
La Comisión de Asuntos Exteriores, que se celebró ese mismo día en el Parlamento Europeo, estaba marcada en la agenda pública. El secretario general de Podemos quiso aclarar al departamento de Protocolo de Zarzuela que “una de las principales prioridades” de su partido es “combatir la desigualdad”. “Como estamos seguros que también lo será para la Jefatura del Estado y, por tanto, estamos convencidos de que comprenderá esta decisión”, añadió.
Todo parecía indicar que el líder de Podemos dedicaría el Día de la Hispanidad a su función institucional en el Parlamento Europeo, como así lo indica su agenda oficial, pero no fue así. Pablo Iglesias no viajó ese día a Bruselas para asistir a la Comisión de Asuntos Exteriores –de la que es miembro- que está marcada en su agenda publicada en la página web oficial del partido en la sección de ‘transparencia’. Fuentes europarlamentarias han confirmado a este diario que Iglesias no estuvo presente en la reunión. Es más, dichas fuentes también afirman que no les consta que el líder de Podemos acuda habitualmente a estas reuniones. En un plenario reciente para tratar asuntos de Exteriores, en concreto la crisis de los refugiados, Pablo Iglesias fue seriamente reprendido por otros parlamentarios porque llegó una hora tarde al debate. Hasta tal punto, que se le pasó el turno de palabra. El Parlamento le dejó hablar al final de la sesión, fuera del orden del día.
Según fuentes de Podemos consultadas por este diario, el líder de la formación “estuvo trabajando en Madrid y presentó una pregunta al presidente de la Comisión Europea que entregó su equipo permanente en Bruselas”, aunque la interpelación no tiene relación con la reunión de la Comisión de Asuntos Exteriores fijada en Bruselas. Por otro lado, las mismas fuentes argumentan que el calendario publicado en la web del partido “marca la agenda de trabajo de Pablo Iglesias como eurodiputado, lo cual implica el trabajo de él y de su equipo”. De hecho, quienes presentaron la pregunta fueron los asistentes de Pablo Iglesias en Bruselas, no él.
La polémica estalló el pasado viernes cuando miembros de Podemos afirmaron que el líder del partido no tenía la intención de acudir a la recepción de la Fiesta Nacional porque “no había recibido la invitación correspondiente”, tal y como informó El Confidencial. Pero poco después, la formación morada rectificó y confirmó que sí había recibido el correo de Zarzuela que contenía la invitación para asistir a los actos oficiales de la festividad del 12 de octubre. Un día después, Podemos declinó la invitación.
El propio Pablo Iglesias explicó el pasado sábado en una entrevista ofrecida a La Sexta Noche que “al final buscando, buscando y buscando” encontró el email en el correo de la Secretaría de Organización. “Nos preguntamos ‘¿Hay que ir o no hay que ir?’, pero los periodistas nos dijeron que es un poquito tostón. Entonces nos reunimos y pensamos: “¿es bueno para el país que nosotros vayamos a eso?”, afirmó. Finalmente decidió no acudir y su ausencia, tras el revuelo y la confusión sobre su invitación, fue muy comentada e incluso reprochada por algunos líderes políticos, entre ellos Albert Rivera, presidente de Ciudadanos, que afirmó ante los medios de comunicación que “para ser presidente de España hay que celebrar el día de España”.